Revista América Latina
Cañete plegada de gestiones ediles que descaradamente le están metiendo la mano al bolsillo de centenares de ciudadanos, con actos irregulares que lindan con lo delictivo.
Dónde está lo que se tiene por Fiscalía de Prevención del Delito ?Desde su cuenta personal de Facebook – el ex consejero regional – Vladimir Rojas Hinostroza – lamentó que en Cañete – no existe una verdadera Fiscalía de Prevención del Delito, capaz de intervenir y parar los abusos de algunos gobiernos locales que descaradamente le están metiendo la mano al bolsillo de centenares de ciudadanos, con actos irregulares que lindan con lo delictivo.Tras recordar que los municipios brindan servicios públicos al vecino por el cual se pagan arbitrios, y se solicitan licencias reguladas en un TUPA. “Hace un año dejaron de publicar sus ordenanzas en el diario oficial El Peruano, y los excesos empezaron su juego”, agregó.Rojas Hinostroza dijo que en Chilca, sus vecinos sufren porque desde hace 7 meses el municipio de Chauca les señala que se “llevaron” el sistema de rentas, y por eso no hay cuponeras.“Es un gobierno local incapaz de determinar deudas tributarias municipales, y cuyos contribuyentes deben apelar a mecanismos “vetados” para conseguir algún documento edil que certifique tributos al día y puedan seguir con sus transacciones económicas”, continuó diciendo.El caso de Lunahuaná, “un perspicaz vecino, don Alejandro Alcalá denunció como el municipio cobra por unas pequeñas impresiones llamadas “cuponeras” 16 soles, lo que en Lima cuesta 1.5 soles”, acentuó, tras cuestionar que en la tierra de una sede de los Panamericanos se debe apelar a la criollada del cobro excesivo por impresión para generarse ciertas rentas a costa del vecino, a costa de quien fuera su elector, recurriendo a métodos vetados, porque se piensa en el cobro y no en el ciudadano.Por último, lamentó que la mayoría de gestiones gestión ediles en Cañete estén empobrecidas, no sólo por la incapacidad para dinamizar la inversión pública, sino porque los servicios que brindan, “no son idóneos y tienen costos excesivos”.