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`Acorralado (First Blood)´ -La agonía de un veterano de Vietnam-

Publicado el 26 julio 2010 por Cinefagos

 `Acorralado (First Blood)´ -La agonía de un veterano de Vietnam-

Sylvester Stallone tuvo dos películas emblemáticas en su carrera. Una fue Rocky y otra Acorralado (First Blood). Si la primera ya se llevó (injustamente para algunos) el Oscar a la mejor película, la segunda nos ofreció una visión de lo que podía sufrir un veterano del Vietnam que volvía a casa (no por Navidad), intentando olvidar los horrores de la guerra.

Más de uno recordaría a John Rambo por sus secuelas, obviando su origen, uno que sí estaba a la altura de lo que se puede considerar una película de acción dramática.

Y es que el éxito de esa película provocó que nuestro héroe volviese a salvar a algunos compañeros que todavía estaban en Vietnam, sufriendo torturas por parte de sus captores (los cuales eran presentados como lo peor de lo peor, algo típico en este tipo de producciones. Si antes los malos eran los indios, ahora le tocaba el turno a los vietnamitas o a los rusos).

De ahí que las innumerables muertes, tiros, explosiones y demás fuegos de artificio fuesen un reclamo inmediato para el espectador que quisiese ver una película de acción al uso.

Pero “First Blood” era mucho más. John Rambo no quería lo que se le iba a venir encima por culpa de un Sheriff (interpretado por Brian Dennehey), el cual, por sus prejuicios, acaba encarcelando al hombre equivocado, uno que le daría unos quebraderos de cabeza inimaginables.

`Acorralado (First Blood)´ -La agonía de un veterano de Vietnam-

Hay unas cuantas escenas que siempre me han encantado de esta película y que me han llegado a conmover. Una de ellas es cuando nuestro protagonista percibe la actitud agresiva del Sheriff que antes he mencionado. Rambo tan sólo iba a ese sitio para reencontrarse con un compañero de armas, el cual había fallecido según le comenta su mujer. Y es que los fantasmas del pasado ya era suficiente compañía como para que la realidad también le diese la espalda. De ahí que cuando Dennehey le “aconseja” que salga del pueblo cuanto antes, acompañándolo en coche hasta los límites del pueblo, la reacción del veterano del Vietnam sea la de volver. La de seguir siendo libre, ya que no había cometido ningún delito y no encontraba justo que se le reprendiese simplemente por estar ahí. Un momento que muestra perfectamente lo que nuestro héroe no está dispuesto a pasar por alto. Ni más ni menos que el que coarten su libertad.

Otro más sería el de su encarcelamiento, más concretamente cuando los policías empiezan a abusar de él, el paralelismo que John Rambo encuentra en su situación actual, con las penurias que tuvo que soportar en la jungla vietnamita (se muestra por medio de flashbacks),  no hacen sino acrecentar ese instinto de supervivencia que no habría salido a la luz si le hubiesen dejado seguir su camino. De ahí que el resto de la película, una vez que escapa de la cárcel y con las fuerzas de la ley en su contra, sea provocado por los actos viles de unas personas que se toman la justicia por su mano, que por el desequilibrio psicológico de nuestro héroe.

Y el tercer momento que se podría destacar sería precisamente el final. Uno que derrocha dramatismo por los cuatro costados y que refleja perfectamente lo que una persona no olvidará en la vida. La tristeza que provoca la guerra por los actos que puedes llegar a cometer o ver. Rambo sólo quiere que lo dejen en paz. Vivir e intentar superar los momentos penosos que soportó en su momento. De ahí que la conversación con su antiguo superior (Richard Crenna) no tenga desperdicio. Muchas veces se ha criticado, algunas con razón, la nula capacidad de Sylvester Stallone a la hora de intentar interpretar una escena dramática (para mí mucho peor ha sido Schwarzenegger, si ponemos como ejemplo a iconos del género de acción), pero tanto aquí como en Rocky creo que está a la altura. También habría que obviar,  ya que ni la frase se decía en la película, la parodia que hicieron en su momento sobre dicha escena, donde “No siento las piernas!!!” acabó siendo algo inventado pero que todo el mundo creía que se había dicho en “First Blood”.

Las razones para recomendar esta película son numerosas. Bien es cierto que si se quiere acción a raudales las posteriores entregas lo hacen con creces y llegan a ser un entretenimiento medianamente digno, pero aquí encontramos la verdadera crítica hacia los que sufrieron por defender a su país y que en su vuelta a casa no acababan encontrando la paz. Precisamente por las personas a las que habían defendido. Quizás eso provocase más tristeza en John Rambo que las torturas a las que estuvo sometido por el vietcong.


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