Hemos estado con los peques en el Museo Naval, menos conocidos que otros de los grandes museos de Madrid, pero que resulta estupendo para ver con niños. Maquetas de barcos de distintas épocas, instrumental de navegación, obras de arte relacionados con el tema naval, armas de época, uniformes... No sé a vuestros hijos, pero a los míos todo eso les fascina, así que resultó una experiencia muy positiva.
El Museo Naval, ubicado en pleno Paseo del Prado, es una forma estupenda de conocer la historia marítima de España , pero también los sistemas de construcción de barcos, la evolución tecnológica del sector, los enseres y el armamento empleado en los barcos... Dispone de 25 salas, organizadas de forma cronológica y una serie de espacios monográficos.
El origen de este museo se remonta a 1792, con la creación de un Museo de la Marina en Cádiz, que nació para recopilar materiales de instrucción de la Armada con motivos didácticos. Los convulsos acontecimientos políticos de la época entorpecieron el proyecto, que se retomó décadas después. Finalmente se inauguró en Madrid en 1843 y pasó por distintas sedes hasta encontrar su ubicación actual a principios de la década de 1930.
Lo que vimos en el Museo Naval
El museo dispone de una amplia colección. Como mis hijos aún son pequeños, no la vimos entera ni de forma muy detenida. Esta primera visita tenía como objetivo ser un primer acercamiento . Ya habrá tiempo de volver cuando crezcan y verlo de manera más seria. Los chicos disfrutaron viendo los barcos, los cuadros de batallas, las colecciones de armas y artilugios de navegación, las monedas, los uniformes... Mi hijo mayor quedó entusiasmado con un timón de un crucero del siglo XIX y con los múltiples instrumentos de navegación. Quería saber para qué servía cada artilugio: astrolabios, brújulas, sextantes, compás, cartas náuticas, catalejos, relojes de arena, etc. Menos mal que a mi marido le gusta esto de los barcos y supo darles respuestas, porque yo no habría podido resolver algunas de sus dudas.
Vimos maquetas de barcos de distintas épocas, desde los tiempos de los Reyes Católicos hasta la actualidad. Mis hijos se empeñaron en que todos eran barcos piratas y no hubo manera de hacerles entender que los barcos tenían otros usos y propietarios, además de los piratas. De hecho, no estoy segura, dado su grado de admiración por ellos, de que entiendan que eran los malos y que se movían con el innoble objetivo de atacar y saquear otras naves para lucrarse. Supongo que la imagen que tienen ellos en su cabeza es más emocionante...
Como os decía, no recorrimos todo el museo, sino que hicimos una selección. Aprovechamos también para visitar la exposición temporal El galeón de Manila, que acaba de terminar. Una muestra dedicada a la ruta comercial que unió tres continentes durante 250 años y que pudimos conocer a través de las naves, las tripulaciones y los valiosos cargamentos de especias, porcelana, seda y plata que transportaban los barcos. Pero, sin duda, lo que más gustó a los niños fue la recreación en tamaño real de la bodega de un galeón . Les resultó fascinante entrar en la bodega de un barco y ver los barriles, las cuerdas, los sacos, el suelo de tablones...
Fue una buena actividad para hacer con niños. Los míos, con 4 y 2 años (vale, casi 3 el pequeño), lo pasaron genial y han estado días hablando de lo que vieron en el museo. Volveremos más veces, porque a medida que crezcan podrán verlo con más calma y en más detalle.
Paseo del Prado, 5
28014 Madrid
Cómo llegar
Metro: Estación Banco de España (Línea 2).
Autobuses: 1, 2, 14, 27, 37, 51, 146, 150, 202 y 522.
RENFE: Líneas de Cercanías. Estaciones de Recoletos y Atocha.
Horarios
Martes a domingo de 10:00 a 19:00 h.
Lunes, cerrado.
Tarifas
Adultos: 3 euros
Niños: gratis*
*Debo aclarar que no sé hasta qué edad las entradas son gratis, porque no lo aclaran en ningún sitio. Mis hijos no pagaron (el mayor tiene 4 años).
¿Conocéis el Museo Naval de Madrid? ¿Habéis estado con vuestros hijos? Me encantaría conocer vuestra experiencia.