Bienvenidos a septiembre, el mes más odiado desde que entramos en parbulito y acaba con nuestra rutina de levantarse tarde-jugar-comer-jugar-comer-dormir. Septiembre es algo así como el waterparty del calendario, pero yo quiero animaros, ayudaros en vuestra depresión post-vacacional y contaros por qué este mes no es tan terrible:
1- Puedes empezar los coleccionables de Planeta Agostini. Creo que no se le ha dado el reconocimiento que se merece a estos productos basados en comprar todas las semanas unas piezas por un valor mucho más alto del real, durante un período bastante largo y que con toda probabilidad jamás llegues a terminar. Esos tíos son unos genios.
2-. Puedes empezar la dieta. Esa dieta que llevas arrastrando desde el 1 de enero, que empezaste allá por abril y que a día de hoy se te nota regular. No desesperes, que con esto de volver a la rutina el cuerpo quema más calorías y ahora sí que sí.
3-. Empieza la liga de fútbol, lo que significa tíos guapos corriendo y que se quitan la camiseta cuando marcan un gol y al final del partido. Ahí se las intercambian, se abrazan con los torsos desnudos…maravilloso, chicas.
4-. Termina la programación de verano. Esa programación diseñada por el mismo hombre que selecciona las películas de Antena 3 los fines de semana a la hora de la siesta. Adiós a las reposiciones, a las series tipo Sensación de Vivir, a los concursos cutres de pueblo, etc…
5-. Puedes estrenar la ropa que compraste durante las rebajas. Todas hemos comprado algo en las rebajas de la temporada de invierno y llevamos el verano deseandito que hiciera frío para poder estrenarlo. Ahora es nuestro momento.
6-. Ser pálida vuelve a ser normal. Se acabó la presión por estar bronceada cuando tu piel se asemeja más a la de Casper que a la del resto de tus amigas. Hay personas que aunque vamos a la playa todas las semanas no nos ponemos morenas y somos felices a pesar de ello.
7-. Nueva etapa. En algunos casos, septiembre marca una nueva etapa y eso, quieras que no, siempre es algo bueno.
Así que lo dicho, sacad la rebequita de entretiempo y os dejo, que de este año no pasa que construya mi propia casa de muñecas.
Bye bye, beloved summer.
Nooooooooooooooooooooooooo………………vuelve, verano, vuelve. ¡Te quiero!