Revista Viajes

ADN matemático en León

Por Angelrequena

Saliendo de León por la carretera de Astorga (N-120) encontramos una rotonda, en el cruce con la calle Agustinos de León, donde se ha erigido una escultura dedicada al ADN. La representación no puede ser más matemática: dos hélices, hexágonos, pentágonos y otros polígonos enlazados.

La escultura es buena muestra de la utilidad de las matemáticas pero también de cómo “falsea” la realidad. Simplifica y ayuda a costa de introducir “anomalías”.

La escultura muestra una porción de la doble hélice y las cuatro bases que las conectan. Los polígonos enseñan la ubicación de átomos y moléculas pero a costa de poner unas líneas inexistentes.

Lo que mantiene enlazados los átomos para formar moléculas son nubes electrónicas que la mecánica cuántica y la electrodinámica nos explican. Las líneas de enlace son un simple recurso visual para indicar una compleja la hilazón, el simple trazo indica que los núcleos están “enlazados” pero de una forma difusa por orbitales electrónicos y por atracciones y repulsiones electrostáticas.

La matemática, y el artista que ha representado la molécula del ácido desoxirribonucleico nos muestra la simetría profunda, lo básico a costa de lo accesorio. La matemática modeliza a sabiendas de sus límites.

La escultura es un homenaje a Rosalind Elsie Franklin que no pudo recibir el Nobel con Crick y Watson por haber fallecido con solo 37 años. La glorieta da acceso al Parque Tecnológico cuenta con su ADN desde febrero de este año 2020.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista