En este vídeo podemos conocer algunos detalles sobre la venta de niños y adopciones ilegales en España a finales de la década de los años 60, niños que eran robados nada más nacer y que se vendían a otras familias con posibles dificultades para poder tener un bebé. En el vídeo se exponen dos casos, el de Juan Luis Moreno y Antonio Barroso, ambos descubrieron que sus padres no eran biológicos gracias a la confesión del padre de Juan Luis Moreno en su lecho de muerte.
El padre de Juan Luis confesó la ilegalidad de la adopción, compró el bebé a un cura en Zaragoza. Al padre le acompañaba otro hombre que también quería comprar un bebé, conocemos el segundo caso de boca de Antonio Barroso, el segundo bebé vendido. Al parecer, cada uno nació en un hospital distinto y se pagó por los bebés en venta la suma de 125.000 pesetas (751 euros), con ese dinero entonces se podía comprar un piso. Los casos de adopciones ilegales a finales de la década de los 60 pueden ser muchos, se denuncia la trama y la corrupción en la época, administraciones, curas y otras personas estaban implicadas.
Juan Luis Moreno y Antonio Barroso descubrieron la verdad, indagaron y respondieron a preguntas como el por qué de los viajes periódicos que realizaban los padres a Zaragoza. Al parecer, éstos visitaban al cura para pagar los plazos pactados por los niños, ya que el precio era muy elevado. La familia de Juan Luis Moreno reconoce no haber visto nunca a su supuesta madre embarazada, para salir de dudas, las pruebas de ADN determinaron la realidad, ninguno de los dos amigos era hijo biológico de la familia con la que estaban.
Ambos amigos fundaron ANADIR (Asociación Nacional de Afectados por Adopciones Irregulares), a ella pertenecen más 100 socios que no sólo fueron robados cuando eran bebés, también fueron vendidos al mejor postor, una trata de niños en toda regla. Desde la asociación se pretende expresar el sentimiento de cada persona, denunciar los hechos y mostrar a los culpables.
Vía | Antena 3