La guerra sin sentido que se está librando en Afganistán desde hace más de ocho años continúa labrándose su propia historia- macabra, pero historia al fin y al cabo. Dos nuevos féretros cubiertos con la bandera del Reino Unido han convertido al conflicto afgano en la contienda- junto con la guerra de las Malvinas (1982)- con más soldados británicos muertos en acto de servicio. En total, y según ha informado el Ministerio de Defensa británico, han caído 255 soldados en combate; los mismos que durante la disputa entre Reino Unido y Argentina de las islas del Atlántico Sur.
Los dos últimos soldados fallecidos pertenecían al Primer Batallón del Real Regimiento de Escocia y se encontraban patrullando a pie una zona cercana a al distrito de Sangin (Helmand) cuando explosionó un artefacto que, previamente, los talibán habían colocado en la carretera para hacer explosión al paso de la patrulla británica.
Así lo ha confirmado el teniente coronel David Wakefield. “Dos de nuestros compañeros nos fueron cruelmente arrebatados pero su valor y fortaleza no serán olvidados. Los dos soldados estaban realizando una patrulla a pie para llevar la seguridad a la población local cerca de la Basa Patrulla Wishtan cuando se vieron sorprendidos por una explosión”, afirmó el portavoz de las fuerzas británicas en la provincia de Helmand.
Los soldados de esta unidad no estaban destinados en la provincia de Helmand dentro del operativo ‘Moshtarak’. Este operativo ofensivo, compuesto por tropas de la OTAN y del ejército afgano, tiene como fin último acabar con los talibán que se encuentran refugiados en esta provincia afgana.