-En el restaurante:
- Si vas a comer una hamburguesa en tu lugar favorito, elige el tamaño regular, en lugar de una grande. Ahorrarás alrededor de 150 calorías.
- Pide las papas fritas pequeñas, en vez del tamaño extra grande. Ahorrarás 300 calorías.
- Pedí gaseosa light o compra la gaseosa pequeña, que tiene 150 calorías menos que la grande.
- Si vas a pedir entrada, compártela con un amigo, sino pedí directamente el plato principal.
- Si el plato que te sirven es muy grande, pide que te envuelvan la mitad. ¡Tendrás solucionado el almuerzo del día siguiente!
-En tu casa:
- Si estás acostumbrado a servirte los snacks de la bolsa, ¡cambia hoy mismo esa costumbre! La próxima vez, sirve algunas papas o galletas en un pequeño plato y guarda el paquete en la alacena. ¡Comerás menos!
- Si te gusta agregarle manteca y crema a la papa al horno, o mayonesa y queso al sándwich, la próxima vez agrega sólo la mitad de lo que acostumbras o compra aderezos dietéticos. ¡Estarás ahorrando el 50% de calorías o más!
No es que una hamburguesa o unas papas fritas sean la opción más saludable, pero teniendo en cuenta estos consejos, la próxima vez que vayas a un restaurante de comidas rápidas o que abras en tu casa unos snacks, podrás consumir menos calorías. Además, notarás que te sentirás mucho mejor.