Revista Viajes

Aguilar de Campoo, románico y dulce

Por Carla10

Aguilar de Campoo, románico y dulce(Puerta y puente del Portazgo)

Aprovechando que el Pisuerga también pasa por Aguilar de Campoo y yo cada año camino de Cantabria, voy a hacer un breve recorrido por el pueblo más dulce, pero también de los más hermosos e históricos de nuestro país. Capital del Románico del norte de Palencia.

Aguilar de Campoo, románico y dulce

Cántabros, íberos, romanos y visigodos poblaron estas tierras palentinas, baluarte durante la dominación árabe y Villa importante en la Edad Media. Fueron los Reyes Católicos en 1480 quienes instituyeron el Marquesado de Aguilar de Campoo, siendo por ello uno de los más antiguos de España con dignidad de Grande de España.

La Villa-Museo fue declarada conjunto Histórico Artístico en 1966.

Alfonso X El Sabio la declaró Villa Realenga por lo que fue el primer fuero Real de Castilla.

El Monasterio de Santa María La Real (siglo XI) , La Colegiata de San Miguel, La Ermita de Santa Cecilia (siglo XII) Románico tardío con su elegante y original torre campanario de tres cuerpos, La Iglesia de San Andrés (siglo XII)  o el Monasterio de Santa Clara (siglo XV) son algunos de los monumentos que podremos visitar.

Aguilar de Campoo, románico y dulce

Pero hay que destacar también la arquitectura civil de toda la villa, más de cien escudos y blasones decoran las portadas de los numerosos palacios, patios, porches y casonas. Son de origen cántabro pero también  casonas indianas y de los oriundos de las antiguas Merindades de Castilla.

Aguilar de Campoo, románico y dulce

La Plaza Mayor porticada está en el centro de la Villa. Presidida por la Colegiata y el Palacio de los Manrique. De arquitectura castellana con influencia  de los pueblos marineros cántabros  en sus famosas balconadas y galerías acristaladas. Cumplen la función de aprovechar al máximo la luz del sol en los cortos días del invierno.

Aguilar de Campoo, románico y dulce

El palacio de los Manrique, o de los Marqueses de Aguilar, tiene dos sencillas plantas y una hermosa fachada de sillería con once balcones forjados. Todo el edificio está sobre arcos de medio punto apoyados en columnas de fuste cilíndrico. Su soportal es uno de los más bellos de la Villa.

Aguilar de Campoo, románico y dulce

La casa del Cura, el palacio de Villalobos-Solorzano, la casa de los VII Linajes o la casa de los Velarde… son algunos de los monumentos más importantes de Aguilar.

Aguilar de Campoo, románico y dulce

Cruzar el rio Pisuerga en estas tierras era fácil y hermoso si uno estaba en Aguilar de Campoo. El puente del Portazgo, que conserva los asientos sobre los que se hacian intercambios comerciales y trueques en la época de los judíos. El Puente Mayor, el del molino Turruntero, el de la Teja… Son algunos de los puentes medievales que cruzaron la historia de España.

Aguilar de Campoo, románico y dulce

La Colegiata de San Miguel, en la Plaza de España, fue elevada a rango de Colegiata a petición del III Marqué de Aguilar de Campoo por el papa Paulo III. De ahí que los escudos del marquesado dominen la plaza desde su torre. Se trata de un magnífico tempo de origen visigodo. De su segunda reedificación en el siglo XIII es  la puerta románica de transición siendo el resto del conjunto del siglo XIV. En ella confluyen estilos tardorománico, gótico, renancentista, barroco y herreriano. El Museo Parroquial de su interior muestra un recorrido por las Edades del Hombre y junto al presbiterio se encuentran los sepulcros de los Marqueses de Aguilar de Campoo.

Aguilar de Campoo, románico y dulce

La portada románica de transidición se abre abocinada bajo nueve arquivoltas con curva apuntada, 18 capiteles con decoración vegetal de hojas de acanto y 16 baquetones.

Aguilar de Campoo es además el pueblo más dulce. Si pasáis junto a la villa en coche y sin tiempo para parar os recomiendo abrir las ventanas para que entre el aroma de los obradores y fábricas de galletas. Dicen que 9 de cada 20 galletas que se consumían en España procedían de Aguilar. En la actualidad quedan tres galleteras, Gullón 1, Gullón 2 y Horno de Galletas Aguilar. Al entrar en el pueblo podéis encontrar la tienda de Gullón y comprar galletas recien hechas.

Os dejo este enlace sobre el artículo que escribió Don Miguel de Unamuno a la Villa de Aguilar de Campoo (Andanzas y visiones de España, 1922)

Belar se debe la vida de tal suerte que quede vida en la muerte


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