Revista Cocina
No os podéis imaginar lo bueno que está este potaje. Ligero y muy nutritivo. Aprovechamos el tiempo de las alcachofas, nos encanta de cualquier forma así que os propongo este plato que estoy segura os va a gustar. El caldo, sin ningún engorde, es delicioso.
Ingredientes:
- 250 gr de bacalao desalado
- 300 gr de garbanzos
- 4 ó 5 alcachofas
- 1 cebolla
- 1 pimiento verde
- 1 pimiento rojo
- 1 tomate maduro
- 1 zanahoria
- Ajo
- 1 hoja de laurel
- 1 cucharadas de tomate frito
- 1 cucharada de pimentón
- Sal y pimienta
- Aceite de oliva
Elaboración:
Limpiamos las alcachofas, les quitamos las hojas más duras y las puntas. Las frotamos con limón para que no ennegrezcan.
En la olla rápida ponemos agua con el tomate entero, media cebolla, 3 ó 4 dientes de ajo enteros y sin piel, un trozo de pimiento verde, otro del rojo, la zanahoria a rodajas grandes, el laurel y sal. Cuando esté caliente le añadimos los garbanzos que habremos tenido en remojo 12 horas antes. Tapamos y dejamos cocinar 15 minutos.
Abrimos la olla y colamos el caldo, sacamos las verduras y las batimos con la batidora.
En una sartén con un fondo de aceite de oliva sofreímos 2 ó 3 dientes de ajos y el resto de la cebolla y los pimientos troceados. Cuando estén tiernos añadimos el pimentón, damos unas vueltas y agregamos la cucharada de tomate. A continuación echamos el bacalao en trozos medianos, las verduras que batimos anteriormente, salpimentamos y seguimos rehogando unos minutos.
Volcamos este sofrito en la olla de los garbanzos. Cubrimos con caldo o con agua (sólo hasta cubrir) y terminamos echando las alcachofas cortadas a cuartos. Tapamos y dejamos cocer 10 minutos.
Volvemos a abrir la olla y dejamos cocinar unos minutos más para que reduzca un poco. Rectificamos de sal y servimos.