El Palazzo Rosso de Génova es uno de las cuarenta y dos casonas aristocráticas que se han incluido en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. La antigua residencia de un dogo es hoy una pinacoteca. Hubo un tiempo como decía Quevedo que el dinero era en Génova enterrado. Los palacios nos dan testimonio. Después todo se desplazó al Atlántico.
El Palazzo Rosso no solo exhibe una importante colección, también posee un conjunto de frescos barrocos que permanecen en su lugar original.
Destacamos una bóveda de Giovanni Andrea Carlone dedicada a Mercurio y las Artes Liberales. Las Alegorías de la Aritmética y la Geometría se encuentran a los pies de Hermes. Dos niños practican la ciencia tumbados en el suelo.
En otra de las lunetas tenemos a la Astronomía y la Música con otra figura con compás y plomada.