Les podrá parecer absolutamente anecdótico lo que voy a contar. Incluso, con la que está cayendo, algo ridículo. Pero a mi me ha parecido algo inmoral, que quieres que les digan.
Resulta que Fran, un alumno del IES Vila-roja de Almassora fue expulsado por haber publicado esta foto:
En ella se ve a un grupo de alumnos abrigados con mantas, ya que la calefacción de dicho centro de la provincia de Castellón, dependiente de la Comunidad de Valencia, sita en Españistán, no tiene dinero para pagar la calefacción. La deuda del Consell con el centro hace que no se tenga ni para poder pagar el combustible necesario.
Fran, el alumno fotógrafo, fue expulsado cuatro días de clase por el delito de haber denunciado en las redes sociales tal situación.
Yo no se que pudo pasarle por la cabeza a la directora del centro. Tal vez el miedo insuperable a enfrentarse al Consell que permite esa situación. No lo se. Pero desde luego, si indecente es que en una provincia donde hay aeropuertos inaugurados sin aviones, estatuas aberrantes de próceres ridículos hasta la estulticia, gastos suntuosos en grandes eventos a la mayor gloria de Ecclestone y compañía de comisionistas ladrones, expulsar a un alumno por denunciar que hasta se tienen que llevar las mantas de casa me parece inmoral e indecente.
Hoy Fran ha vuelto a las clases, no sin la espada de Damocles sobre su cabeza, ya que está previsto que próximamente tenga lugar un consejo de convivencia, “para abordar la situación y estudiar si la acción del joven puede ser o no penalizada”.
Si la directora tuviera un mínimo de sentido común, lo que debería hacer es ponerse junto a Fran a denunciar la situación. Hay que joderse
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