Levadura fresca o de panaderíaTambién se puede encontrar bajo la denominación levadura prensada, ya que viene en forma de bloques de pasta prensada. Se debe conservar en frío, ya que es fresca, y tiene una vida útil relativamente corta (de 1 a 2 semanas). Para su uso se debe diluir en agua tibia (o incluso leche) antes de añadir a la harina.Levadura secaSe trata también de levadura fresca, salvo que en este caso está deshidratada y en polvo y viene en sobres herméticos. Debido a esto, su vida útil es mayor que la de la fresca y no se requiere diluirla previamente en agua antes de utilizarla. Levadura químicaComo su nombre indica, no se trata del microorganimo sino de un emulsionante químico. Se trata de bicarbonato y otros componentes que, durante la cocción en el horno, reaccionan con los diversos ingredientes y forman gas. De hecho, esa es la otra gran diferencia entre la levadura química y el microoranismo. Mientras que, como acabo de decir, la química actúa durante el horneado, la levadura fresca actúa antes del horneado, puesto que se destruye a los 50oC.Ahora bien, en la receta de hoy utilizamos concretamente la “levadura nutricional”. Se trata de la levadura del género de la cerveza (Saccharomyces cerevisiae), pero se diferencia de ella en que en lugar de cultivarse en trigo, se cultiva en melaza. Por lo tanto, podemos decir que es una levadura fresca inactiva (puesto que no produce gas) y se utiliza normalmente en las recetas vegetarianas como suplemento debido a sus propiedades. Entre estas propiedades encontramos ser una fuente excelente de fibra, proteínas y vitaminas del grupo B. Según la marca que la comercialice la fortifica también en vitamina B12. Después de saber un poco más sobre los distintos tipos de levadura, pasamos a la cocina a hacer un rico Queso veganoIngredientes
- 1 puñadito de nueces
- 1 puñadito de anacardos
- 1 vaso de agua
- 1 chorrito de limón
- 1 cucharadita de postres de sal marina
- 2 cucharaditas de poste de levadura nutricional
PreparaciónLo primero que haremos será remojar los frutos secos, para lo cual, la tarde anterior deben ponerse en agua en cuencos separados, similar a cuando vamos a hacer un plato de legumbres.Al día siguiente, escurrimos los frutos secos los ponemos en el vaso de la batidora, añadimos el resto de ingredientes (excepto el agua) y batimos, mientras se bate vamos incorporando el agua poco a poco hasta obtener una crema suave y homogénea.Ya estaría listo para utilizar, en este caso lo he calentado y utilizado como salsa de acompañamiento a un plato de brócoli con arroz basmati.Con esto nos despedimos hasta el lunes, esperamos que os haya gustado y no dudéis en contarnos vuestras experiencias con este “queso vegano”.Realizado por Cristina Vallespín Escalada y Tamara Valencia Dueñas