Los estudios han demostrado que los alimentos que parecen ayudar con la eyaculación precoz son los que son ricos en vitaminas y minerales. Cuando hay un aumento de flujo sanguíneo en el pene debido a la excitación sexual, se produce una erección. Por lo tanto la dieta para la eyaculación precoz debe incorporar esos alimentos que ayudan a mejorar el flujo de sangre en el cuerpo, especialmente en la región genital.
Los alimentos como las ostras, chocolates y fresas son considerados como afrodisíacos comunes. Estos alimentos contienen ciertos nutrientes que son conocidos por mejorar la excitación sexual, pero no son los más eficaces en el tratamiento de la eyaculación precoz. Huevos, arándanos y cereales son ejemplos de alimentos útiles para la eyaculación precoz . Los huevos contienen las vitaminas A, B, D y E y también los minerales calcio, selenio, zinc y hierro. Los huevos también contienen colesterol, que juega un papel importante en la fabricación de las hormonas sexuales. Los arándanos son conocidos por mejorar el flujo de sangre a los genitales si se consume en cantidades adecuadas. Sin embargo, el consumo excesivo de arándanos se debe evitar, ya que podría dar lugar a algunos efectos secundarios desagradables. Los cereales contienen ácido fólico, que ayuda a regular el flujo de sangre buena y también evita obstrucciones en las arterias. Esto es útil para aumentar el rendimiento sexual. Los alimentos como la lechuga y pescado también son buenas adiciones a la dieta diaria. Vitaminas para la eyaculación precoz son las vitaminas del grupo B. En caso de que uno no es capaz de obtener cantidades adecuadas de nutrientes a través de la dieta, es una buena idea consultar a un médico acerca de la ingesta de suplementos dietéticos. Con el fin de curar la eyaculación precoz y aumentar el rendimiento sexual, también es importante la dieta para promover la buena salud del corazón. Si el corazón funciona bien, entonces el flujo de sangre a través del cuerpo será mucho mejor. Problemas como la obstrucción de las arterias no sólo puede dificultar la circulación en el área genital, sino también puede poner a una persona en riesgo de enfermedad cardiaca.