Esta semana llega a nuestras carteleras la última producción de James Cameron "Alita Ángel de Combate", que ha puesto tras las cámaras, esta vez, ni más ni menos, que a Robert Rodríguez (Sin City, Abierto hasta el amanecer…), para adaptar el famoso manga de Yukito Kishiro, que ya fue llevado a la pantalla en 1993, por Hiroshi Fukutomi, en un mediometraje de animación absolutamente de culto. Con un aspecto muy distinto, pero con esa alma de manga, nos llega ahora esta adaptación de puro espectáculo y pirotecnia visual, que tiene la intención de arrasar en taquilla, y no por pocos años…
En esta época de moda de los Live-Action (Ghost in the Shell, Death Note…), era raro que un productor tan gigante como Cameron no se apuntase a ella. La película, sin duda, tiene su sello. Es un espectáculo gigantesco, lleno de efectos especiales, imágenes para ver en la pantalla más grande posible y si es con 3-D, mejor que mejor. Todo está hecho para dejarnos embobados en la butaca durante 2 horas, con escenas de acción trepidantes, villanos a lo grande y una protagonista con carisma.
Lo mejor que se puede decir de Alita: Ángel de combate es que consigue su propósito. La diversión está asegurada, a pesar de que el guion, y la profundidad del relato, quede, en bastantes ocasiones, en un segundo plano muy bajo. No se le puede pedir mucho más, o al menos no creo que el filme tenga esa intención. Por eso, encontrarse al menos con un producto decente, que visualmente encima supere todo lo previsto, pues es ya un logro. Las escenas de acción son espectaculares. Robert Rodríguez ha conseguido crear una puesta en escena envidiable, con un frenetismo, en muchas de sus secuencias, que envuelven por completo al espectador (también gracias a un uso del 3-D que te mete completamente en la película). Sin duda, no es un filme para todos los gustos, ni para todos los espectadores, pero su público objetivo quedará más que satisfecho.
Pero, por desgracia, no es oro todo lo que reluce. Como antes comentaba, la parte de trama y guion queda demasiado por debajo de lo que ofrece su parte más frenética y de acción. Nos encontramos, ni más ni menos, que con un romance distópico, tan visto últimamente en las sagas juveniles (Los juegos del hambre, Divergente…), quizá con algo mas de enjundia, pero tratado con bastante menos mimo que en el manga original. Nada resulta original o sorprendente en su argumento, o al menos da la sensación de que uno lo ha visto ya antes. Ese mundo cyberpunk podría tener un montón de posibilidades, pero no se muestra mucho mas allá de lo esperado. Finalmente, la película se convierte en algo predecible, y si tuviese que ser por su argumento, todo se vendría rápidamente abajo.
Es por ello por lo que destaca mucho más que, finalmente, no lo haga, y sin duda, en parte, es gracias a la dirección de Robert Rodríguez, que mantiene un espectacular tono en la acción de la película. También, a ello se suma un reparto que, por lo general, está bastante notable, y más tratándose de una película tan poco de actores como esta. Muchos de los problemas de estas grandes superproducciones vienen de la poca simpatía que uno consigue tener con sus personajes, porque todo resulta manufacturado y sin alma. Aquí, en concreto, los personajes de Alita e Ido son realmente carismáticos. A Christoph Waltz es casi siempre un placer verle en pantalla, y mas en un personaje mas suave (por así decirlo) como este. Por su parte, Rosa Salazar, consigue crear una protagonista con fuerza, garra y mucha personalidad propia.
El primer paso de este tándem Cameron-Rodríguez cumple en el cometido de crear una obra entretenida. Lo que esperemos que consigan, si siguen trabajando juntos, es el realizar una obra mas redonda, con menos baches argumentales, y que no de esa sensación de vacío en sus partes con menos acción. Sobre todo, en lo que se refiere al núcleo central de la película, donde esta resbala más. Por suerte, el final deja con bastantes ganas de seguir viendo sus aventuras y, lo más seguro, es que, si hay triunfo de taquilla de por medio, las tendremos (al menos son necesarias). Esa sensación, sin duda, es algo bueno para una película cuya mayor misión es la de llenar las salas de cine.
En definitiva, tras los flojos intentos de los últimos Live-Action, es una alegría decir que esta película si consigue mejores resultados. Aunque, para futuras secuelas, esperemos que los propósitos sean aún más altos, y que todo lo negativo que esta tiene, se disipe sin dejar rastro. Pero al menos, Alita: Ángel de combate es un filme entretenido, bastante adecuado para ir el fin de semana a verlo sin prejuicios, y pasar una tarde agradable. Además, seguramente, a los fans del original, les satisfará muchísimo. Eso sí, lo más recomendable, como espectáculo visual de la marca Cameron, es verla en la sala más grande posible, y si es con 3-D, mucho mejor. Sin duda, es el plato fuerte de la película, y reforzarlo lleva la experiencia a un nivel muchísimo más alto.
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- ##check## Lo bueno
- El entretenimiento que ofrece, dejando con ganas de más en el aspecto más positivo de la palabra.
Las escenas de acción, espectacularmente rodadas y técnicamente impecables. - ##times## Lo malo
- El guion, que no está a la altura del espectáculo visual que se ofrece.
La parte central del filme, que decae mínimamente en algún momento. El volver a revisitar el mundo distópico, algo demasiado recurrente últimamente.
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- Ambientación 7.5
- Sin duda, el mundo cyberpunk creado es espectacular. La ambientación digital es muy buena y, en general, se hace bastante cercana y creíble. Un mundo del que te quedas con ganas de conocer más de sus rincones.
- Desarrollo de Personajes 6.5
- Se coge cariño a varios de los personajes, y Alita tiene una evolución inteligente. Son personajes creados, en su mayoría, con fuerza. Pero algunos se quedan muy flojos, como el de Jennifer Connelly y Mahershala Ali, ya que no se entienden muy bien algunos de sus actos, y quedan en la superficie..
- Argumento / Guión 5.5
- Flojo. El argumento se queda algo vacío, teniendo en cuenta las posibilidades que da el universo creado. Pero, sobretodo, es el guion el que mas baches contiene. Da la sensación de que todo está ya demasiado visto y oído.
- Banda Sonora 6.5
- Cumple perfectamente su función de agilizar el relato y mantener unas escenas de acción a un nivel aun mas trepidante, pero tampoco te quedas con ella de manera especial.
- Entretenimiento 7.0
- Un magnífico entretenimiento para el fin de semana. Pero, sobretodo, si lo haces a lo grande, en una sala IMAX o con 3D. La parte visual lo merece, y te mete más en la película.
- Montaje / Innovación técnica 8.0
- Como todo en Camerón, la innovación técnica es casi lo mas importante. En este caso, acompañado de Rodríguez, han creado un espectáculo visual y técnico de gran altura. Las escenas de acción están rodadas, técnicamente, de manera perfecta, y el 3D da un paso mas allá en el espectáculo. Por su parte el montaje también hace una gran labor, sobretodo en las escenas de acción, que te pegan a la butaca. No se puede decir lo mismo de otras zonas de la película, pero en general es bastante notable el resultado de este apartado.
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- Puntuación Total 7 / 10