Respirad tranquilos, ni estáis en un examen de la ESO ni esto es una clase de Lengua Castellana. Aunque recordemos que la morfología es la rama de la lingüística que estudia la estructura interna de las palabras —es decir, la flexión, la composición y la derivación—, esto sigue siendo Indiepolar, el blog del polo opuesto a lo comercial; y esta vez el término «Supersubmarina» es el nexo entre la morfología y lo indie.
Supersubmarina es una palabra llana a remolque de dos prefijos heredados del latín (esa lengua que mal llamamos muerta siendo en realidad inmortal). El primero de los prefijos es el bisílabo super-, que de acuerdo a lo que explican los de la RAE, denota ‘lugar situado por encima’, ‘superioridad o excelencia’ o ‘exceso’. (Que cada uno juzgue cuál de las tres definiciones combina mejor con el recorrido de la banda baezana). Seguidamente hallamos el sub-, que normalmente significa ‘bajo’ o ‘debajo de’. En acepciones traslaticias puede indicar inferioridad, acción secundaria o atenuación; pero visto el vocablo que le sigue («marina»), parece no haber duda que debemos tomar ese ‘bajo’ como concepto (pero que nadie crea que su música se efectúa bajo la superficie del mar, por favor).
El adjetivo «marina» suele acompañar a nombres relativos al mar, que es un elemento muy presente en las letras de Supersubmarina —así lo vemos en temas como Ola de calor, Viento de cara, Arena y sal, etcétera—; pero desde un punto de vista morfológico, lo más interesante es el morfema -a, que marca el género femenino de la palabra. No es lo mismo «Supersubmarina» que «supersubmarino».
Si eliminamos los dos prefijos derivativos del principio y el morfema flexivo del final, leemos «marin». Marin. Marín. ¿Quién se apellida Marín? Nada más y nada menos que Jose Chino, letrista, voz y guitarra del grupo. Coincidencia o no, puede no ser más que una curiosidad baladí, pero no nos negaréis que tiene su puntito de gracia.
Y hasta aquí el análisis morfológico de Supersubmarina. Esperamos que leerlo os haya entretenido tanto como a nosotros redactarlo. Ha sido divertido.