Hoy, 28 de octubre de 2014, Ángel Santiesteban-Prats cumple veinte meses de injusto encierro, esperando la Revisión de ese juicio amañado que lo condenó sin pruebas porque es INOCENTE. Su hijo, utilizado siendo niño para declarar contra su papá, ya desmontó completamente la farsa tramada contra Ángel y aún así lo mantienen encerrado. Su único delito: oponerse a la dictadura que azota a Cuba desde hace más de medio siglo.