Hace algo más de 5
meses, conté en este espacio sobre la escala en Seychelles que hizo el avión que
alquiló Cristina Kirchner para trasladarse a Cuba, Dubai, Indonesia y Vietnam
en enero de este año.
En aquella
oportunidad, la información la publicó el Boletín Oficial.
Es decir, dos meses
después del viaje, el autor del Decreto 23/2013 escribió que entre el 21 y el
23 de enero la jefa del Estado había estado en el archipiélago ubicado en el océano
Indico.
Sin embargo, recién el
último fin de semana, nos enteramos que la parada fue de 13 horas y 30 minutos.
¿Si el 23 de enero, cuando Cristina Kirchner arribó al país, ya conocían que la
escala había durado menos de un día, por qué el Boletín Oficial difundió información
incorrecta dos meses más tarde?
Todo lo demás ya lo
sabemos o, al menos, creemos que lo sabemos. Lo cierto es que los máximos
especialistas en aeronavegación afirman que ese descenso era innecesario.
Casualmente,
recordé otra parada tal vez también desprolija, la que tuvo lugar en Los
Angeles, Estados Unidos, a principios de noviembre de 2010, cuando aún no habían transcurrido dos semanas desde la muerte de
Néstor Kirchner.
El avión que transportaba a la primera mandataria iba a Seúl,
Corea del Sur, debía hacer una escala corta, pero duró más de la cuenta, con una noche de hotel incluida y con un cruce con el servicio de seguridad de los Estados Unidos.
¿Qué hizo Cristina
Kirchner en aquella oportunidad? Ya nadie lo recuerda.
En fin.