Escultor del romanticismo realista
francés, 1796 – 1875.
Comenzó su carrera artística como
pintor, bebiendo de Delacroix y de Gericault. Pero pronto se dedicó a la
escultura. Trabajó con un orfebre que reproducía figuras de animales. Barye
trabajaba como profesor de dibujos zoológicos en el Museo de Historia de París.
Su escultura estaba dedicada al tema animal. La mayor parte de sus obras son
bronces de pequeño tamaño donde pretendía captar episodios dramáticos entre animales, el lado irracional de la
naturaleza en esos animales, y a ser posible con animales exóticos, no
corrientes en Europa. Este escultor le concedía un valor a la técnica porque
para él no era solo importante el tema, sino también el diálogo entre espacio y
volumen, las texturas, el claro-oscuro, el movimiento, que hacen que su obra sea muy
expresiva.
Tigre devorando a un gavial
Jaguar devorando una liebre