Casi olvidado por la historia del cine en nuestro país, al igual que algunos otros nombres como: Pilar Arcos, Rosita Pilar o Luis Llaneza; su extensa filmografía con presencia en más de 100 películas (cuatro de ellas como director), así como su relevancia dentro de la vida social californiana de farándula y vodevil, bien debían ser reivindicadas.
Nacido en Madrid el 26 de Septiembre de 1887, pasó su infancia en Andalucía donde a los pocos años se queda huérfano de padre. Razón esencial y detonante de una delicada situación económica que empuja a madre e hijo, a iniciar la travesía del sueño americano.
Con nulo interés para la interpretación, no será hasta 1910 cuando impulsado por la también actriz Helen Ware, comienza su experiencia como actor. Consolidándose su carrera tan sólo tres años después, con la firma de su primer contrato cinematográfico; génesis al poco tiempo de una de las trayectorias más valoradas del panorama mudo estadounidense.
Con una carrera ascendente, durante los años veinte se rodeó de las estrellas del momento; teniendo papeles principales y compartiendo cartel con Cary Cooper, Greta Garbo, Gloria Swanson o Pola Negri, en relevantes producciones como: Un enemigo invisible (1912), Su derecho a vivir (1917), La tierra de Lobos (1926), Mare Nostrum (1926) o Es (1927).
Grabado su último trabajo en 1929 bajo el título de Romance del río grande, con el cine sonoro su presencia se vio fuertemente denostada (debido a su marcado acento español) y se dedicó al doblaje de cintas españolas o la dirección de algún que otro largometraje.
No obstante, durante la década de los cincuenta obtuvo algunos papeles secundarios y reflotó en cierta medida su actividad perdida; destacando su papel como Emilio Figueroa en el Western: Centauros del desierto (John Ford, 1955).
Casado desde 1923 con la millonaria norteamericana y heredera de la industria del petróleo, Daisy Canfield Danziger, su mansión (Residencia Canfield-Moreno) pasó a convertirse en el centro de reunión de la "creme de la creme" hollywodiense y la alta sociedad americana.
Residencia Canfield-Moreno
Con un carácter y fisonomía mediterráneas, ha sido durante largo tiempo considerado junto a Rodolfo Valentino, el Latin Lover por excelencia. Fallecido en 1967, a causa de una apoplejía, sus restos descansan en el famoso cementerio: Forest Lawn Memorial Park de Los Ángeles (California). Como curiosidad resaltar que por su contribución al desarrollo de la industria del cine, le fue concedida una estrella en el paseo de la fama de Hollywood.A continuación un repaso en imágenes por parte de su trayectoria: