Por Martín Rudistein
Que partido para lamentarse toda la semana, el ping pong de chances dará seguramente algo así como 10-2, se mereció ganar pero el merecimiento se justifica con bochas que entren en los 3 palos.
Huracán no hizo nada en todo el primer tiempo, salvo un córner y All Boys lo buscó por todos lados, tuvo 3 córners seguidos que salvó espectacularmente Monzón (se come goles todos los partidos y viene a ser figura con nosotros, típica) a cabezazos de Matos, Casteglione y Ferrari. Después tuvo un par Ereros, que definió mal y una el uruguayo Rodríguez.
El segundo tiempo ya se preveía que lo ibas a lamentar. Era claro para casi todos los hinchas que después de perderte tantos goles, la primera jugadita que tuvieran por mérito o por suerte, terminaría adentro.
Matos y Pérez García volvieron a perderse 2 mano a mano y recién a los 30 luego de un tiro de esquina y cabezazo del 9, Ferrari pudo empujar la única que Monzón dio rebote, 1 a 0 y Huracán estaba muerto.
Francamente parecía controlado y que los pibes del globo no podían hacernos un gol ni aunque se lo propusieran, pero no. Faltó viveza, faltó tenerla, faltó buscar foules para poner el resultado en el freezer, faltó hasta tirarla a la mierda en alguna y como se veía venir un defensor nuestro la rechazó al córner y en la última nos volvieron a empatar. En el gol hay 2 errores, primero desatención de la defensa, que no la rechaza y deja solo a Soplan y segundo y para mí principal, de Cambiasso, que faltando 30 segundos se queda atornillado a la línea de cal en vez de salir a romper todo y que le cobren foul contra el arquero.
Se jugó bien, sobretodo tomando en cuenta lo hecho con Lanús y Tigre, pero si tenés 3 o 4 claras, tenés que hacer 2 goles sí o sí. Por otro lado se repite que nos hagan un gol a los 45 (Estudiantes y Lanús, ambos en PT) y además le dimos vida a un muerto, porque Huracán jugó un desastre.
Esta vez creo que no se le puede reprochar nada a pepe Romero, ya que ante la lesión de Soto (otra vez antes de los 20) sorprendió y gratamente, al poner a Pérez García e ir a buscar la victoria.