Aprende a vivir en presente

Quizá vivir en el tiempo presente sea una de las tareas más difíciles a las que podamos enfrentarnos. Estamos tan acostumbrados a que nuestros pensamientos se muevan tan deprisa entre pasado y futuro, que solemos olvidar lo más importante: el ahora.

Aunque pueda sonar a tópico, el presente es lo único que realmente existe. Si nos orientamos hacia el pasado, seguramente no recordemos exactamente cosas que nos sucedieron, o bien las hayamos distorsionado sin darnos cuenta para que nos resultasen aceptables o coherentes con nuestros esquemas.

Si “viajamos” hacia el futuro mentalmente, puede ser mucho peor. Por muy predecible que a veces resulte nuestro universo, es imposible que logremos saber lo que ocurrirá mañana. Si por jugar a ser adivinos, dejamos de hacer ciertas cosas (no saldré porque seguro que me aburriré, esa película no me va a gustar, etc) no haremos más que condicionarnos.

Por eso, lo más aconsejable y a la vez emocionante es vivir como si no hubiese futuro (siempre con un mínimo de sentido común). Solo así podrás disfrutar de cada momento y aprovechar las cosas que verdaderamente son y están.