Analizando categorías que importan
¿Qué serían los Oscar sin el mejor actor, la mejor actriz, el mejor secundario, la destacada de reparto? No serían Oscars, sino algo insípido y aburrido.
Entonces, analicemos de lleno esos cuatro rubros que valen las más de tres horas de ceremonia, a pesar de que cada año, haya mínimo dos de los cuatro con ganadores previsibles y casi indiscutidos.
Best Supporting Actress
Será Mo’nique, sin dudas. Las otras cuatro la escoltan. Hay dos que la acompañaron en diversos premios, una que resaltó promediando las nominaciones, y una única sorpresa, más que bienvenida.
Mo’nique es la Jennifer Hudson del año. Actriz consolidada por otros medios (la tv aquí, la música en el caso de Hudson), afroamericana, debutante prácticamente en cine, con un papel a medida que sabe explotarlo hasta lo soberbio. Dreamgirls era un film menor, Precious... está por verse, pero Mo’nique ha sido una gran embajadora, y ha ganado del primero al último premio al que ha sido nominada, caso similar al de Hudson, con la diferencia que aquella podía caer en los Oscar si Adriana Barraza o Rinko Kikuchi se convertían en sorpresas en favor de Babel.
Nadie recordará a Mo’nique de aquí a dos años, como sucedió con Hudson (¿alguien la ha visto más allá de su triste papel en el film de Sex & the City?), pero se puede decir que al menos en este caso, en los rubros secundarios, la Academia se permite premiar realmente “lo mejor del año”, y no teniendo en cuenta trayectorias o deudas, como suele ocurrir en ocasiones en los rubros actorales principales.
Desde ya que Mo’nique no está a la altura de una trayectoria como la de Julianne Moore, ninguneada por los Oscar, y cierto es que Penélope Cruz y Vera Farmiga ya están bien sólidas, con varios proyectos por delante. El caso es que si realmente Mo’nique compone un notable papel, la Academia la premiará el 7 de marzo, y luego, si te he visto, no me acuerdo. Y no está mal que así sea.
Sensaciones
No me gustó que nominen a Penélope Cruz. Es claro que está de moda. Menos si tenemos en cuenta que afuera quedó Julianne Moore o Samantha Morton. Hasta hubiera preferido alguna sorpresa como Judi Dench, o el dúo de Bastardos sin gloria (Laurent y Kruger), o Susan Sarandon...
De todos modos, sí fue una alegría ver entre las cinco a Maggie Gyllenhaal. Actriz ascendente, gran soporte de Jeff Bridges, literalmente, es una buena oportunidad para que le ofrezcan mejores papeles.
Utopía: ver triunfar a Anna Kendrick, por su hermoso papel en Amor sin escalas, o a Vera Farmiga, en menor medida.
Otros premios cantados en la historia de la categoría:
- Mercedes Ruehl, The fisher king
- Jennifer Connelly, A beatiful mind
- Renée Zellweger, Coldmountain
- Rachel Weisz, The constant gardener