Parece que no importa que los equipos tuvieron vacaciones, estuvieron de pretemporada y tienen algunas caras nuevas. ¿Por qué? Porque no cambió casi nada de lo que veíamos en el Apertura que terminó siendo aburrido por la superioridad de Boca sobre el resto. San Lorenzo mostró que su coqueteo con la zona baja de la tabla de promedios le afecta cada vez a la hora de salir a la cancha e Independiente sigue con la tibieza a la hora de atacar.
En Lanús, el local le puso bien en claro al San Lorenzo de Madelón las diferencias que hay entre un plantel y otro. Y también desnudó las flaquezas anímicas de un equipo que no supo reponerse de unos 15 minutos iniciales fatales que lo vieron 0-2 con sendas pelotas paradas. ¿Que hizo el Ciclón para revertir el mal comienzo? Nada. Por sus limitaciones a la hora de la generación de juego, o por el pésimo momento anímico de un plantel que absorve los problemas institucionales.
Unos problemas institucionales que no hacen más que complicar el futuro del DT. Ya se comenta en el seno de la Comisión Directiva que si ante Estudiantes no hay un buen resultado el entrenador tendría las horas contadas. ¿Y el apoyo al proceso de Madelón? Ninguna. Una medida que sería coherente con la mala administración del presidente Carlos Abdo.
Otro de los que mostró más de lo mismo fue Estudiantes, que no pudo con un Newell’s que hace 16 partidos que no gana pero que se vio un poco más ordenado. El Pincha sigue dependiendo siempre de Verón en la creación y de Braña en la recuperación. Los de Azconzábal necesitan tener un buen arranque para animar un Clausura que tendrá a Boca y Vélez ocupados con la Copa.
Finalmente la otra decepción del sábado fue Indepediente. El Rojo fue a San Juan con la idea de mostrar su chapa de candidato (?), pero se encontró con un San Martín ordenado que mordió y mordió y supo incomodar a un equipo con pocas ideas y sin poder de gol. Tan preocupante es la anemia ofensiva que el único gol que tiene en lo que va del 2012 es Schiavi, quien anotó en contra del arco de Orion en el amistoso de verano. ¿Farías? Casi no la tocó porque es un jugador que necesita recibir juego y no lo ‘asistieron’. Es muy pronto para sacar conclusiones, sin embargo, las equivocaciones se repiten y el juego es el mismo de siempre…