Revista Arte
Me gusta esta imagen que me he encontrado en Hallen kunst. La Razón es que ilustra perfectamente un fen´omeno que si bien no es nuevo, puesto que ya en los 80 Haring o Baskiat saltaron de la calle a la galería de arte, ultimamente se ha convertido en un fenómeno mundial. Es frecuente que centros de arte y galerías programen eventos relacionados con el arte urbano e incluso algún artista de la calle ha llegado hasta el mundo de las subastas. Por otro lado he escuchado a algún grafitero decir que no pinta por encargo. Supongo que esta actitud tiene que ver con conservar el origen de la pintada como manifestación al margen de cualquier tipo de norma, corriente, pretensión económica... ¿Qué les parece? Pintar en la calle es un acto de libertad, puramente artístico, una rebeldía, un modo alternativo a los circuitos tradicionales para darse a conocer...
El padre de la imagen es Stefan Winterie.