- No es tu culpa tener esta enfermedad. No ocurrió por ser una mala persona o por actuar o no actuar de determinada manera: la mayoría de las veces las enfermedades reumáticas son inevitables.
- No debes sentirte culpable por lo que puedes o no puedes hacer. Enfócate positivamente todas las cosas que aún puedes hacer y no negativamente en las que no.
- Es posible que tengas que cambiar tu forma de trabajar (cambiar de trabajo o dejar de trabajar), así como realizar cambios en tu estilo de vida en general.
- Es posible que necesites ayuda o asistencia de otras personas.
5. Aunque no existe cura para tu enfermedad, debes persistir con tu tratamiento. Si algún medicamento o tratamiento no te funciona deberás seguir buscando hasta encontrar el más adecuado para ti. Rendirse nunca ha sido la opción.
Mejoramos sin dañar
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