De Arturo Sanchez, de sus embutidos ibéricos y de sus estudios sobre nutrición, alimentación y salud os hemos hablado en otras ocasiones. Su estudio sobre la incidencia del Jamón de Bellota en las personas que sufren diabetes tipo II se demostraba cómo la grasa del jamón ibérico de bellota, al ser insaturada y rica en ácido oléico, es cardiosaludable y muy nutritiva. En otra ocasión, el estudio realizado se centró en qué aportaba el consumo de este producto para la práctica del deporte. La relación directa que existe entre alimentación y rendimiento, sobre todo en las actividades físicas más largas. Un producto que además de las grasas aporta proteínas, imprescindibles para la recuperación del músculo.
En esta ocasión vamos a ir a la práctica, ya que Arturo Sánchez comercializa, como ya es habitual en estas fechas, su estuche Heritage. Su packaging ya denota que no es un producto habitual, sino un producto único.
Un lujo al que nadie debe renunciar en la medida de lo posible, ya que hablamos de un Jamón Ibérico 100% de Bellota de doble montanera. Cuidando siempre que nunca le falte la bellota al animal, de que esté en la dehesa, dejan crecer al cerdo alargando su vida para llegar así a esa doble montanera que aportará al producto más volumen, rompiendo los mitos de que el jamón de cerdo ibérico es pequeño. No es así, lo que ocurre es que no suele dejarse crecer más de lo necesario, ya que entonces provocamos un inmovilizado que muchas empresas no pueden permitirse mantener. Hay que engordar al cerdo ibérico si queremos conseguir un jamón de más peso, esperar unos meses más y dejar que siga comiendo. Eso si, la forma de engorde debe ser siempre la misma: la bellota.
Quejigo, encina y alcornoque son los tres tipos de bellota que toman los cerdos en los diferentes meses del año. Al ser un producto natural y no poder controlar su volumen, la abundancia de bellota marca en muchas añadas el sabor final del jamón. Que haya mucha bellota, poca lluvia y temperatura suave durante la época de montanera sería el escenario ideal. Pero no siempre es posible.
Los años en los que hay menos bellota, el producto suele ser más caro. Algo que a priori puede parecer una incongruencia, es lógico si tenemos en cuenta que si hay escasez de bellota, ésta se pagará más cara, por lo que provocará un precio más elevado en el producto final. En cambio el producto final puede ser de menos calidad respecto a otros años en que ha habido más abundancia de bellota.
Todos estos condicionantes se ven amortiguados con la doble montanera de Arturo Sánchez, ya que el pasar dos temporadas en vez de una en la dehesa, comiendo bellota, se equilibra en la manera de lo posible que el cerdo tome la cantidad de bellota adecuada y de todo tipo.
Con su estuche Heritage, Arturo Sánchez ofrece una cata vertical de las añadas 2011, 2012 y 2013. Seis sobres de 80 gramos cada uno, dos de cada añada, permitirá percibir los matices de cada temporada. Una muestra de tres situaciones diferentes que provocaron tres sabores diferentes.
En 2011 hubo pocas lluvias y acortó la montanera en tiempo. Sin embargo, la bellota fue de gran calidad. El rojo intenso, un aroma potente y equilibrado en sabor. En 2012 la climatología fue generosa en este aspecto, con una temporada de lluvias que empezó pronto y tuvieron especial intensidad en otoño, provocando una cantidad y calidad de bellota de encina y alcornoque suficiente y duradera prácticamente hasta el mes de Abril. Un resultado redondo para los jamones de ese año. En 2013 la lluvia volvió a retraerse y la bellota de encina fue más prolífera que la de alcornoque. Sin embargo, esta última fue de excelente calidad, dando matices algo más dulces.
Unos datos que pueden encontrarse en el estuche Heritage de Arturo Sánchez para poder hacer la cata sin necesidad de ningún especialista. Como un desplegable, la caja se abre enseñando los sobres de cada añada con sus respectivas características, sirviendo de guía.
Un regalo ideal para impresionar a cualquiera, o para una cena en la intimidad, Heritage de Arturo Sánchez se convierte este año en una joya efímera que disfrutarán solo algunos de los privilegiados que consiga esta caja de edición limitada.