Todavía no tengo muy claro si Matt Maltese es el nuevo Rufus Wainwright, el nuevo Adele, o el típico que encabeza todas las quinielas del festival de Eurovisión y al final se queda en un discreto sexto puesto, pero créanme: este chico de apenas 20 años y nombre (es un alias, ¿verdad?… ¿en serio se llama así?) de estrella del porno, es el nuevo ALGO… O debería serlo, por lo menos, porque aunque probablemente no tiene la voz sobrenatural de los arriba mencionados, su potencial compositivo (del comercial ya ni hablamos: podría vender discos como churros, con el apoyo adecuado) deja poco lugar a dudas, a tenor de las pocas, pero apabullantes, pistas que pueden escucharse en su cuenta de Soundcloud.
Asentado en Londres, el joven artista se confiesa enamorado de la música de autores tan consagrados y dispares como Leonard Cohen o Francois Hardy, aunque lo cierto es que pocos rastros vamos a encontrar en sus arrebatadas baladas al piano de la musa francesa, y ya ni digo del contenidísimo cancionero del canadiense. Más bien en las antípodas de este último, las cuatro canciones con las que se presentaba el año pasado (un EP de título “In A New Bed” que se cerraba, eso sí, con una versión del “Paper Thin Hotel” de Cohen) dejaban claro que lo suyo es el baladón en perpetuo ascenso a los cielos. Quizá algo justito en la producción: que alguien llame a la sinfónica de Bratislava, que alguien haga una nueva pelicula de James Bond con fabulosos créditos en su apertura, que las canciones de este hombre piden a gritos el tratamiento (algunos dirán pomposo, yo diría espectacular) que se merecen. De cualquier manera, aunque me consta que no es plato para todos los paladares, estoy seguro que no seré el único que queda desarmado por la eficacia -lacrimógena, sentimentaloide, que sí, que sí, lo que quieran…- de canciones como “Studio 6” o ” Even If It’s a Lie“, dignísimas sucesoras del dramón desatado de la siempre-defendible “All By Myself” de Eric Carmen.
El caso es que Maltese acaba de publicar otra canción de esas de -con perdón- sevacagarlaperra, y yo he picado como un canelo, y no puedo dejar de escucharla. Lo confieso: si en el disco de debut (porque habría uno, espero..) de este chico va a ser todo tan fabulosamente pasado de rosca como en “As The World Caves In“, “Vacant In The 21st Century” o “Strange Times“, compro. No sin una cierta sensación de culpa, pero no podré evitarlo: que a mí todo este melodrama exacerbado de hechuras clásicas me acaba desbordando, y que aunque es evidente que -de momento- Matt Maltese no cuenta con el pedigrí de Father John Misty, o Tobias Jesso Jr, a estas alturas de la vida aún sigo necesitando que de vez en cuando un chico con un piano ponga la banda sonora adecuada a mis revolcones en la miseria.
Y sí: es otra canción pesimista sobre el modo en que Putin y Trump y cía. mandan a la porra nuestro planeta, pero no dejen que eso les disuada de darle al play. Suban bien el volumen y agénciense unos kleenex. Es una recomendación.
Anuncios Publicado en: RevelacionesEtiquetado: 2017, Cantautor, Matt Maltese, Rufus WainwrightEnlace permanenteDeja un comentario