Los consumidores de hoy son muy diferentes a los de hace solo unos cuantos años: sus preferencias están en continua evolución. Por eso, las marcas tienen que adaptarse a los nuevos tiempos, a los consumidores y a sus gustos, e ir cambiando para evolucionar por el buen camino.
Sabiendo esto, Coca-Cola ha lanzado un nuevo diseño de sus latas, dando un papel importantísimo al rojo. Pero, para esto, la marca ha ido cambiando el diseño de su packaging poco a poco. En 2005, veíamos el color de las latas en diferentes colores. Ya en 2015, la marca introdujo rojo en todas sus variedades para, llegados a 2018, introducir el rojo en toda la lata para que este color sea el protagonista.
Esta nueva identidad de Coca-Cola va acompañada de una campaña de comunicación, basada en aspectos de información y formación, en televisión, prensa, radio, internet, exteriores y puntos de venta para explicar al público las diferentes opciones disponibles según sus necesidades y estilos de vida. Un formato muy diferente a lo que estábamos acostumbrados a ver de la marca en los últimos tiempos, que tendrá el objetivo de hacer recordar a la gente el nuevo aspecto de su packaging.
Además, la marca ha abierto en Madrid la primera exposición sensorial dedicada a un color, donde la gente podrá experimentar olores, sabores, tacto, vista y, como no, el sabor de Coca-Cola.
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