Ruanda es un pequeño país situado en la región de los Grandes Lagos de África Central. Es pobre, sus habitantes sufren hambrunas y hace veinte años fue golpeado por el azote de un genocidio masivo que hace veinte años se llevó las vidas de 800.000 habitantes. Pero a pesar de eso, en los últimos meses ha conseguido convertirse en un ejemplo para el sector de la energía solar.
Lo ha hecho consiguiendo levantar en un tiempo récord una granja solar de 17 hectáreas y un total de 28.360 paneles que giran siguiendo la trayectoria del sol para mejorar en un 20% la eficiencia de los paneles comunes. Se trata de un inmenso proyecto con el que en 2017 esperan ser capaces de ofrecerle electricidad a la mitad de su población.
Hasta hace unos meses Ruanda sólo generaba 110 megavatios para una población de 12 millones de personas. Para que os hagáis una idea, con 46,77 millones de habitantes en España el año pasado se generaron 102.259 megavatios, aunque sólo utilizamos la mitad de esa energía. ¿Os imagináis cómo funcionaría un país disponiendo de cien veces menos energía de la que consume?
El proyecto más rápido de África
Allí no necesitan imaginárselo, de hecho menos de un 15% de su población tiene luz eléctrica en sus casas. Por eso su gobierno aceptó una oferta conjunta de empresas como Gigawatt Global, Norfund y Scatec Solar, financiadas por la iniciativa Power Africa de Obama, para llevar adelante el proyecto de crear su esta granja solar que vista desde el aire tiene la forma del continente africano.
Después de que las empresas consiguieran finalizar la ronda de financiación, la fabricación de este complejo comenzó en febrero del 2014. La interconexión de la planta con la red eléctrica nacional se consiguió en julio de ese mismo año, en septiembre ya producía al máximo de su capacidad, y en febrero de este 2015 fue inaugurada de forma oficial.
Los paneles solares vienen de China, los inversores y transformadores de Alemania y el campo está conectado a un servidor en Oslo, desde donde se pueden monitorizar remotamente a través de Internet. Es un proyecto costoso, pero sus empleados tienen claro que es un buen modelo para llevarle luz a las aldeas más remotas, ya que si algo sobra en África es luz solar.
La planta solar genera 8.5 megavatios, aumentando en un 6% la capacidad de producción de electricidad del país y cubriendo las necesidades eléctricas de 15.000 hogares. Pero el gobierno de Ruanda espera que este sea sólo un primer paso para tratar de conseguir que en 2017 se pueda abastecer a la mitad de su población.
Gigawatt Global, una de las empresas implicadas, muestra optimista ante lo que califican como un éxito, y han anunciado que su objetivo es el de conseguir generar hasta 1.000 megavatios de energía solar en todo África para el 2020. Es evidente que estas cantidades no son suficientes para abastecer a toda su población, pero sirve como ejemplo de que poco a poco se puede ir viviendo de la energía solar.
Los beneficios para Ruanda
Además de para mejorar la capacidad de creación de energía del país, esta planta también ha tenido un importante impacto laboral. En el estudio de impacto socioeconómico realizado por Gigawatt Global podemos leer que se contrataron a expertos locales para la supervisación y preparación de la zona para las obras, además de para realizar estudios de viabilidad.
En total se estima que la planta ha servido para crear 350 puestos de trabajo, en los que se incluyen los 200 obreros (la mayoría locales) que fueron empleados para su fabricación y la plantilla de 30 empleados de mantenimiento que tiene la planta según los datos de la empresa.
También le ha dado una mayor visibilidad a la zona, donde la organización Agahozo-Shalom Youth Village trabaja para darle un techo y escolarizar a 512 jóvenes. Tal y como cuentan en The Guardian, además de traer visitantes (como Bono de U2) que les dan visibilidad, sus jóvenes están especializándose en energía solar, uno de ellos trabaja en la planta y varios otros lo hacen en proyectos paralelos para crear solares paneles para 250.000 hogares.
Chaim Motzen, co-fundador de Gigawatt Global declaró durante la inauguración del complejo que aquel país tiene un excelente ambiente para los negocios por su escasa corrupción, y que esperan que lo que están haciendo allí sirva de catalizador para que emerjan más proyectos con energías renovables en la región y también en otros países de los alrededores.
Vía | The Guardian
Imágenes | /\ \/\/ /\ , Gigawatt Global y oledoe