Antes de Semana Santa tuve la suerte de participar en el taller de bloggers Royal Copesco-Sefrisa dirigido por Nacho Garbayo en su escuela Sueños de cocina.
Un par de días antes recibí en casa un pequeño paquete con productos de la marca entre los que se encontraban unos lomos de bacalao desalado. Fue verlos y saber inmediatamente qué destino les esperaba.
Es posible que haga la friolera de 12 años que comí este delicioso bacalao. Lo preparó mi madre y yo, que por aquellos entonces vivía en Londres pero me encontraba de visita en Madrid, tuve el privilegio de disfrutarlo.
Recuerdo regresar a Londres con la receta en la maleta y dispuesta a prepararlo a la primera de cambio pero mis intenciones quedaron en eso, en intenciones.
Sin embargo, ayer rescaté la receta del baúl de los recuerdos y me lancé a prepararla con unas ganas e ilusión tremendas, alimentadas por la perspectiva de servir un sabroso, jugoso y sano bacalao como comida a mi familia. Y, sobre todo, por la idea de poder degustarlo de nuevo.
Si también vosotros queréis sorprender, no dudéis en prepararlo para vuestros familiares y amigos.
¿Os cuento cómo?
Necesitamos (para 4 personas)
- 4 lomos de bacalao desalado
- 3-4 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
- 1 cebolla, pelada y picada
- 1 diente de ajo, pelado y picado
- 1 cucharada de harina de trigo
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 2 manzanas golden, peladas y en finos gajos
- 500 ml de leche
- Pan rallado
- Mantequilla (opcional)
- Sal
Preparación
Comenzamos preparando la salsa y para ello calentamos el aceite en una sartén. Cuando haya tomado temperatura, añadimos el ajo y la cebolla. Pochamos a fuego lento, con la sartén tapada para que no se resequen, hasta que comiencen a dorarse (unos 8-10 minutos).
A continuación añadimos la harina, el pimentón y la manzana y removemos hasta integrar. Vertemos la leche y continuamos removiendo mientras cocemos a fuego lento durante 10 minutos. Ajustamos el punto de sal a nuestro gusto.
Mientras se cocina y espesa la salsa, pasamos a preparar el bacalao. Lo introducimos en una cacerola con agua y lo cubrimos con agua fría. Colocamos la cacerola al fuego y, una vez comience el agua a hervir, la retiramos y escurrimos el bacalao.
Cubrimos una fuente de horno con parte de la salsa, colocamos los lomos sobre ella y los cubrimos con el resto. Espolvoreamos con pan rallado y repartimos sobre este unos dados de mantequilla.
Introducimos la fuente en el horno, bajo el gril, colocando la rejilla en la parte superior. Una vez dorada la superficie (5-6 minutos), retiramos del horno y servimos inmediatamente.
Esta es una manera más de preparar bacalao que se suma a la cantidad de propuestas que están siendo publicadas en distintos blogs estos días así como a las aprendidas en el taller de Sueños de cocina que fueron todas preparadas con productos Royal.
*Este collage está elaborado con fotos tomadas de Lazy Blog ante la imposibilidad de descargar los archivos facilitados por Tinkle (empresa promotora del taller en nombre de Royal Copesco-Sefrisa).