Los entrenamientos de Jerez se vieron marcados por averías totalmente esperadas que recortaron el número previsto de vueltas de rodaje de los monoplazas. Uno de los momentos más espectaculares, que ya forma parte de la historia, tuvo que ver con el golpe contra las barreras que sufrió el W05 de Lewis Hamilton al perder el alerón delantero en plena recta durante la primera jornada.
Al caótico principio de los test, en los que se notó la ausencia de Lotus y la tardía llegada de Caterham, se le unió la poca velocidad y el escaso sonido que emitían unos coches que dejan al espectador con ganas de más. Además, la mayoría de monoplazas no aceptaron del todo bien la implantación de los nuevos sistemas electrónicos así que sufrieron averías que les obligaron a detenerse retrasando su programa.
Ni para Ferrari, ni tampoco para Red Bull, Jerez fue un camino de rosas. Los italianos tuvieron que abortar misión tras las cinco primeras curvas de la vuelta de instalación del F14 T de Kimi Raikkonen. Por otro lado, Sebastian Vettel se quejó del difícil pilotaje de su nuevo RB10, que terminó siendo protagonista por todos los sucesivos problemas que les hicieron abandonar el trazado andaluz con el punto de mira ya puesto en Bahréin.
Los incidentes que ocasionaba la unidad de potencia de Renault en sus equipos cliente - Red Bull, Toro Rosso y Caterham - cada vez eran más evidentes. Mientras que los de Milton Keynes anotaron 19 vueltas en toda la semana, el buen funcionamiento del W05 le permitía registrar en un solo día 97 vueltas.
Con el debut de Daniel Ricciardo las cosas no cambiaron para Red Bull, pues al australiano lo detuvo la "fumata blanca" que salía de la parte trasera de su RB10. La mayor parte de la escudería de los toros alados ponía ya rumbo a sus centros de trabajo para solucionar tanto los problemas propios como los existentes con Renault esperando tener a punto el monoplaza para la segunda tanda de entrenamientos invernales.
Los franceses han estado trabajando mano a mano con Red Bull desde que el equipo abandonó Jerez. Los principales objetivos del director técnico de este equipo, Adrian Newey, son solventar el problema con los gases de escape, que incendiaron la carrocería en más de una ocasión y por otro lado, mejorar el sistema de refrigeración del coche, para que no se produzca tal sobrecalentamiento.
De esta forma, Bahréin será una prueba de fuego para demostrar que Red Bull vuelve a estar a la altura. También puede ser una oportunidad para que los clientes de Renault puedan recuperar el tiempo perdido. Además, Sahkir será el escenario perfecto para el debut final de Lotus, en el que el responsable de dar las primeras vueltas será Romain Grosjean.
Aunque las escuderías Mercedes, Williams y Sauber aún están por confirmar su alineación de pilotos para estos segundos entrenamientos de la pretemporada, se sabe que Vettel y Alonso serán los protagonistas de Red Bull y Ferrari durante las dos primeras jornadas, mientras que Ricciardo y Raikkonen les tomarán el relevo este viernes y sábado para continuar probando en pista.
El segundo asalto de pruebas permitirá a los fans del Gran Circo asentar sus ideas sobre la fiabilidad de los monoplazas; asegurar su percepción sobre la velocidad que pueden alcanzar los motores Turbo; recordar un sonido al que la Fórmula 1 aún no les ha acostumbrado y coger apuntes sobre algunas de las cosas que se verán el próximo mes en Australia.
Revista Deportes
Bahrein podria ser la salvacion de la pretemporada 2014 de f1
Publicado el 18 febrero 2014 por Rd @iformulardSus últimos artículos
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