Ayer asistimos a otro mitin verbenero y orejero en el palco. Una vez más el señor Trujillo hizo los deméritos necesarios para ser uno de los nuevos usías oficiales de la Malagueta.
“Bajo nivel y verbena orejera en el palco”. Por Juanjo Franquelo.
3ª Semifinal del VII Certamen internacional de Escuelas Taurinas La Malagueta.
Novillos muy bien presentados de Esteban Isidro (propiedad de la Casa Chopera). Buenos en general, menos el segundo, el más grande, un burraco de bella estampa que pasaba por toro en cualquier plaza de la Costa del Sol, parado y con cierto peligro. Si se le da un puyazo con puya de novillada no hubiera pasado nada. Nos reencontramos otra vez con el dúo Trujillo-Farelo en el palco. ¡Para echarse a temblar!
JUAN PABLO LLAGUNO (E.T. Aguascalientes). Muy en el toreo mexicano, fácil, poco profundo, con oficio y poco arte. Baja la mano y mete pico, no carga la suerte y no se ciñe. Le tocó en suerte un novillo de buenas condiciones que derribó al enorme jaco de picar. Pinchazo y aviso. Termina con estocada caída al encuentro. Ovación.
SAMUEL ORTIZ (E.T. de Málaga). Tuvo la mala suerte de tocarle el peor y mayor novillo, y poco pudo hacer. Larga cambiada y verónicas lentas. Aquí se acaba la historia. Brinda al diputado Florido y lucha por sacar algunos pases que no son lucidos porque el animal no le acompaña. Revolcón y estocada atravesada, cuatro descabellos. Silencio. Le seguimos viendo muy buenas maneras a este chico. Esperemos que siga progresando y que no lo maleen.
JAVIER MORENO (E. T. Badajoz). Este novillero engreído no merecía ni una letra en esta reseña. Manda traerle el eral a sus peones, por poco les pide que se lo pongan de rodillas a sus pies. Hace un símil de verónicas muy rápidas y un vulgar quite por chicuelinas. Saca al albero a su compañero de escuela José Garrido y le brinda. Ni alguaciles, ni presidente, mueven una pestaña, aquí todo se traga y ya me pongo de los nervios. Cuentista el muchacho, hibrido del Cordobés y el Fandi y, el “entendido” público se rompe las manos aplaudiendo. Mucha pose y ni un buen pase, adornos y posturitas. Acaba de tendida y el palco le otorga las dos orejas como premio al demérito y a la heterodoxia destoreadora. Este presidente orejero debería ser la última vez que presida en la Malagueta.
DAVID GONZALEZ (E.T. Madrid ). Esperábamos más de este chaval, pues siempre los alumnos que han venido de Madrid, han mostrado calidad. Verónicas insulsas y tristes tafalleras en el quite. Brinda a Felipe Díaz Murillo, que ha regido los destinos de la Escuela de Tauromaquia "Marcial Lalanda" de Madrid durante tres décadas alcanzando las máximas cotas de prestigio. Uno de los pocos taurinos con una trayectoria impecable, verdadero y buen aficionado, querido por todos los estamentos relacionados con la fiesta de los toros. El novillo no tiene mucho picante y el torero es muy soso, así que el gazpacho resulta incomible. Pinchazo, estocada, y descabello con aviso. Aplausos.
JOSÉ ANTONIO PÉREZ (E. T. Salamanca). Vulgar con la capa. Va mejor con la muleta con un buen eral. Templado, sabiendo lo que hace y con cierta clase. Sufre algunos enganchones, pero es normal en un novel. Faena de muleta de más a menos. Estocada delantera, caída y perpendicular. Aviso y otra estocada en mejor sitio. Una oreja, que estimo ha sido la más merecida de la tarde.
JONATHAN JIMENEZ (E. T. Algeciras). El peor con diferencia de los 18 participantes. Recibe al bicho a porta gayola sentado en una silla y, se supone, que lo que quiere dar es una larga cambiada. Resultado: toro por un lado, torero por otro y la silla no sé por donde. Capotazos que los da mejor el bombero torero. Banderillas eléctricas, sin cuadrar en la cara y mucho peores que las del Fandi, que ya es decir...Todos los pseudopases de muleta enganchados y dando tironazos. Tira los trastos y hace un desplante que el público aplaude a rabiar. Ese público, ayuno del más mínimo conocimiento para intentar comprender lo que se desarrolla en un ruedo, festivalero, vociferante y gesticulante. Habría que ingeniárselas para en estos festejos intentar explicar a estas buenas gentes, pero que se muestran en los tendidos como la “muchedumbre sedienta” a la que se refirió Federico García Lorca, las mínimas bases de la lidia. Sé que es tarea harto difícil, como sé que también no les interesa a los taurinos, pues lo que realmente quieren son espectadores ignorantes, facilones y orejeros. Y vino la traca final. Tras un pinchazo y revolcón, otro pinchazo y revolcón, aviso y media en el chaleco, el palco le concede una oreja. ¡Vergonzoso!
Por decisión del jurado del Certamen, formado por los profesores de las escuelas participantes, las presidencias y los representantes de la Diputación de Málaga, la empresa de la Malagueta y la Asociación de aficionados prácticos, pasan a la final que tendrá lugar esta tarde, como primer clasificado José Garrido, segundo Javier Moreno, ambos de la Escuela de Badajoz, y tercero el representante de Aguascalientes Juan Pablo Llaguno.