Se han encontrado restos pertenecientes al Bronce Final y al Tartésico; también restos ibéricos.
Pero es en el período romano donde la presencia de hallazgos es mayor. Así nos encontramos restos de explotaciones de uso agrícolas y sobre todo sus afamados Baños Romanos.
Situada al este de la provincia de Sevilla, La Luisiana fue fundada en tiempos de Carlos III. De ahí la procedencia de su nombre, en referencia a los hijos del rey, Luis y Ana.
Pero mucho antes de esta fundación a orillas del Arroyo Carrión los romanos encontraron un buen emplazamiento para instalarse.
El edificio de los Baños Romanos se encuadra dentro de una serie de lugares con importantes restos arqueológicos. Entre éstos podemos destacar la presencia de una posible villa, Obulcula, y el Castillo de la Monclova.
Además de los Baños Romanos, en La Luisiana se han descubierto otros vestigios de la época visigoda. Tal es el caso del cimacio visigodo, que actualmente se expone en el Museo Arqueológico de Sevilla.
Se sabe que La Luisiana fue fundada por orden del Rey Carlos III, en 1768, durante la colonización de la Sierra Morena y que sus primeros vecinos debieron ser principalmente gentes venidas de Bélgica, Holanda, Suiza, Austria e Italia.