Falta un mes y una semana para que sea el Dia Internacional contra la Violencia de Género, el 25 de Noviembre.
Normalmente suelo escribir posts con cierto humor pero con este tema escribo con un tono bastante duro porque lo merece.
No hace falta que llegue ese día para reivindicar que se acabe cualquier tipo de maltrato, sea físico o psíquico, a NADIE. El problema se halla tanto en la justicia como en la sociedad y la educación.
Basta ya.
Basta ya de tener que soportar cada día la noticia de una nueva mujer asesinada a manos de su pareja. ¿Hasta cuantas hemos de llegar para que seamos conscientes del problema que existe?
Basta ya de que las mujeres nos tiremos piedras sobre nosotras mismas porque no hay NADA que justifique la violencia: ni ir vestidas provocando, ni salir de noche, ni ir por determinados barrios. Es cierto que hay que prevenir, pero por el simple hecho de que hay gente repugnante que se aprovecha de su fuerza para abusar de una mujer, no porque eso justifique la agresion, ni muchísimo menos.
Basta ya de que por ser amables piensen que pueden coquetear con nosotras.
Basta ya de que no entiendan que NO significa NO. Sin tonterías de que una mujer dice no cuando quiere decir si.
Basta ya de los machistas. Y en machistas se incluyen tanto hombres como mujeres que les educan como tal.
Basta ya de tanta indiferencia invisibilizando el problema o justificándolo.
Soy madre de una niña y en cuanto tenga uso de razón le explicaré que en una pareja ambos son IGUALES y hay que quererse ante todo y el amor conlleva respeto. Alguien que te insulta, humilla o pega no te respeta. Alguien que no te respeta no te quiere. No vale con que haya sido una única vez, no merece la pena por mucho que luego te diga que te quiere.
Los maltratadores son personas acomplejadas, que se sienten inferiores, frustrados, enfermo mentales (por su degradación como persona no como atenuante), violentos, manipuladores, que no quieren a sus parejas.
Está situacion tiene que acabar y es posible con la educación tanto a hombres como a mujeres. Basta ya.