Si tu bebé está cerca de nacer y está proyectado que sea prematuro o ya has tenido a tu bebé antes de las 37 semanas, debes estar llena de preocupaciones sobre sus cuidados y todo a lo que le tienes que prestar especial atención. Y no es para menos, pues los bebés prematuros están expuestos a muchos más riesgos que un recién nacido a término, y por ello, aquí te diremos todo lo que tienes que saber sobre los cuidados de un bebé prematuro.
RIESGOS PARA UN BEBÉ PREMATURO
Los riesgos de un recién nacido prematuro se deben, en gran parte a su tamaño reducido y la falta de desarrollo en sus órganos, como los del sistema respiratorio, digestivo, inmune y su piel, lo que ocasiona que estén expuestos a distintas complicaciones que pueden dañar la salud de tu bebé. También, existen reflejos motrices y comportamientos no desarrollados que pueden dificultar su alimentación y otras actividades.
Los bebés prematuros pueden nacer con problemas de salud y son más susceptibles a infecciones de todo tipo, problemas respiratorios, son más sensibles al frío y pueden tener dificultades para alimentarse del pecho de la madre. Estos riesgos se presentan en todos los bebés nacidos antes de la semana 37 de gestación y solamente aumentan entre más temprano haya sido el nacimiento.
CUIDADOS EN EL HOSPITAL
La primera atención que se le debe dar a un bebé prematuro será dada en el hospital, donde se llevará al infante a una unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN), donde se les otorgará un ambiente controlado y protegido donde podrán mantenerse a salvo hasta poder ser dados de alta. Aquí, se cuidará su temperatura, su peso, su respiración y que se alimente de manera adecuada a través de monitoreo constante, equipo médico que lo ayude a respirar y planes de alimentación especializados.
Para que puedan ser dados de alta, los bebés prematuros deben poder mantener su temperatura en una cuna abierta durante 24 a 48 horas, hacer todas sus tomas de biberón o pecho sin ayuda de sondas u otro auxiliar, y por último, estar aumentando de peso de manera constante. Esto se logra, normalmente, entre 2 y 4 semanas de estar en la UCIN.
CUIDADOS EN CASA
Después del alta, los bebés prematuros ya se encuentran en una mejor condición, pero es necesario ser extremadamente cuidadosos con las infecciones, asegurándonos que quien toque al bebé tenga las manos desinfectadas y no se encuentre enfermo. También es indispensable que el bebé no pase frío, de preferencia estando en contacto piel con piel con el pecho de la madre.
Igualmente, es necesario que reciba todas sus vacunas y tenga visitas regulares con el pediatra, así como seguir las indicaciones dadas por la UCIN. Es importante recordar que tu bebé todavía puede desarrollar problemas respiratorios, apnea del sueño y tener dificultades para comer de vez en cuando, por lo que es importante tener buena comunicación con su pediatra.
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