Revista Cocina
Me encanta cuando llega la temporada de fresas (o más bien fresones), fuente de muchas vitaminas y minerales tales como vitamina C, E, ácido fólico, calcio, yodo, fósforo, magnesio, hierro y potasio. Aunque son deliciosas por si solas también combinan bien con la mayor parte de frutas y productos lácteos.
Nada para combatir la astenia primaveral y empezar el día llena de vitaminas como un delicioso zumo de naranjas con fresas. A veces lo preparo con la licuadora y otras con la batidora, no importa la forma en que lo prepares, el resultado es, simplemente, delicioso. La proporción que utilizo es de tres fresones por cada naranja.
Además, cuando tengo tiempo, me gusta reservar una pequeña parte del zumo para hacerme una mascarilla con él. Es tan fácil como remojar un disco desmaquillador en el líquido y lo aplico a pequeños golpecitos por toda la cara y el cuello. Lo dejo actuar el máximo tiempo que me sea posible, para poder disfrutar de las propiedades de la vitamina C que contienen ambas frutas, y después lo retiro con agua fría.
Os recomiendo esta receta :)