Antes de los antibióticos, antes de que
hubiera una farmacia en cada calle y mucho antes de que el alivio para el dolor
viniera en pequeñas pastillas, ya se utilizaba el entorno natural para ayudar a
curar todo tipo de enfermedades.
Quizá la medicina
natural más conocida sea la china, que ha sido utilizada en el lejano
Este desde hace miles de años y está siendo cada vez más aceptada en el mundo
occidental.
Un poco más cerca de casa hay numerosas plantas y
hierbas que puedes encontrar en la farmacia de tu barrio,
herbolarios o incluso en tu jardín, y que puedes usar como una forma
libre de químicos para sentirte mejor.
Hierbabuena
Cada vez más personas recurren a la infusión de hierbabuena
como alternativa al té y al café. Para otros, lo más cerca que están de esta
planta es cuando toman un mojito. Pero la hierbabuena es mucho más que una
infusión refrescante. Es bien conocida por sus propiedades como relajante
muscular, lo que la hace excelente para tratar el síndrome de colon irritable y
para mejorar la digestión. Por eso es bueno tomarla después de las comidas en
lugar de un café expreso. Recientemente se ha descubierto que la hierbabuena es
recomendable para tratar los resfriados, por sus propiedades antivirales. Puedes
beberla o bien extraer el líquido de las hojas y aplicarlo en zonas
irritadas.
Equinácea
Quizá uno de los remedios herbales más conocidos, la equinácea
es fácil de plantar en tu propia casa. Pero si no te va mucho la jardinería,
también la puedes encontrar en pastillas en cualquier herbolario, farmacia e
incluso en algunos supermercados. Durante los meses de invierno parece que media
oficina está tragando pastillas de equinácea para protegerse de los resfriados y
la gripe, y hay evidencias científicas de su efectividad. Está demostrado que
contiene proteínas que ayudan a proteger las células contra infecciones virales,
lo que la hace tan buena para combatir la gripe. Un beneficio menos conocido de
la equinácea es que mejora la piel y ayuda en el proceso de curación de heridas,
reduciendo la inflamación.
Jengibre
El jengibre es una hierba reconfortante que hace entrar en
calor y es muy buena para aliviar los síntomas de la gripe. El té de jengibre
con un poco de miel y limón interceptará el virus antes de que te sientas peor.
Se trata de un descongestivo natural, además de tener propiedades
antihistamínicas. También es efectivo para mejorar la circulación y relajar los
músculos, por lo que algunos expertos aseguran que puede incluso ayudar a
prevenir los coágulos. El jengibre es muy recomendado también por su efecto
calmante en problemas digestivos, como la náusea.
Regaliz
No es necesario que te hartes de comer gominolas de regaliz
para obtener todos los beneficios de la planta. Los practicantes de la medicina
china suelen utilizar el regaliz para mejorar la eficacia de otras hierbas, pero
también tiene beneficios por sí misma. Para las mujeres que sufren de quistes en
los ovarios, ha sido comprobado que el regaliz regula los niveles de
testosterona y mejora la fertilidad. También es un excelente antiinflamatorio
para el dolor de estómago y los problemas digestivos.
Salvia
La salvia tiene poder antiséptico, antiinflamatorio e incluso
se ha demostrado que reduce los sofocos en mujeres con menopausia. Gracias a sus
propiedades antisépticas, la salvia suele ser utilizada en pastas de dientes
naturales, y las cremas que contienen este ingrediente son buenas para tratar
las picaduras, la varicela y el herpes.
Ajos
Uno de los mejores inventos de la Madre Naturaleza. Tomar dosis
regulares de ajo (lo puedes tomar en pastillas si no quieres tener un aliento
como para parar un camión) ha sido demosrado que previene las enfermedades
cardiovasculares, la hipotensión e incluso el cáncer, gracias a su capacidad
para incrementar los niveles de grucoronil transferasa, una enzima que limpia el
organismo de carcinógenos. Además, el ajo también es antiviral y anti hongos,
por lo que ayuda a combatir infecciones.
Espino blanco
Todo buen herbolario debería tener espino blanco. Mejora las
arterias coronarias, ayudando al corazón a bombear la sangre y rebajando la
presión arterial. También ayuda en casos de hipotensión reforzando los músculos
del corazón.
Tomillo
Coge una bolsa de tomillo en el supermercado y estarás un paso
más cerca de acabar con cualquier bacteria que anide en tu aparato digestivo. Es
uno de los mejores antibacterianos naturales y excelente para combatir los
hongos. Ha sido utilizado históricamente para tratar la bronquitis.
Romero
Está demostrado que el romero tiene un efecto estimulante en la
función cognitiva y algunos expertos incluso aseguran que podría ser esencial en
la batalla para encontrar una cura al Alzheimer. Es bueno para aquellos que
tienen dificultad para concentrarse, estimula la memoria y reduce la fatiga, el
estrés y la ansiedad.
Manzanilla
Los efectos reconfortantes de una taza caliente de manzanilla
son bien conocidos. Los expertos señalan ahora por qué esta planta es tan
beneficiosa para ayudarnos a dormir. Beber manzanilla incrementa los niveles del
aminoácido glicina en el cuerpo, lo que actúa como relajante y tiene un efecto
sedativo. La glicina también alivia los espasmos musculares, así que la
manzanilla puede ser usada además para aliviar los dolores menstruales.