El aceite de oliva, ese oro líquido del que todos nos beneficiamos en la comida por su sabor y sus múltiples propiedades beneficiosas para la salud, también aporta cosas buenas a nuestra piel y cabello, siendo muy utilizado en el sector de la belleza.
El aceite de oliva es muy rico en tocoferol , además de en ácidos grasos insaturados y minerales esenciales para las células. Esta composición se traduce en propiedades regeneradoras e hidratantes que aportarán los nutrientes necesarios para que nuestro cabello recupere su vitalidad y belleza. Existen diferentes maneras de utilizarlo en el cuidado del cabello:
- Calentándolo unos segundos en el microondas y aplicándolo sobre el cabello húmedo, incluyendo el cuero cabelludo, para reparar las puntas y prevenir la caída.
- Añadiéndolo a las mascarillas capilares, para potenciar su efecto de nutrición e hidratación profunda.
- Añadiendo unas gotas a un vaporizador de agua, para evitar en encrespamiento del cabello, y especialmente de los rizos.
También se puede utilizar para el cuidado del rostro y las necesidades de la piel, aplicándolo directamente o mezclado con un cosmético o crema base:
- Repara las uñas quebradizas.
- Es cicatrizante y reparador, para combatir las estrías, manchas y marcas de acné.
- Muy útil para el tratamiento y prevención de las arrugas y patas de gallo.
Estas son sólo unas pistas para incluir el aceite de oliva en nuestro cuidado diario, ya sabéis que tenemos un sorteo activo en Facebook del blog hasta este miércoles gracias a Mansalva Gourmet, tienda online que nos regala una de sus latas del mejor aceite de oliva virgen extra para que podáis poner en práctica todos estos consejos, ¡no dejéis de apuntaros!
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