La dieta mediterránea ha demostrado ser una de las mejores formas de comer. Esta dieta asegura una vida más sana y larga, gracias a su componente principal, el aceite de oliva.
Las personas que viven en la región mediterránea son algunas de las más sanas y longevas del mundo. El aceite de oliva proporciona muchos beneficios para la salud, pero a menudo se pasan por alto sus beneficios para la salud cerebral.
Estas son algunas de las formas en que el aceite de oliva ayuda a mantener el cerebro sano y lo protege de la degeneración:
El aceite de oliva es rico en antioxidantes:
El aceite de oliva es muy rico en antioxidantes naturales conocidos como polifenoles. De hecho, contiene más de 30 compuestos fenólicos que son poderosos antioxidantes y eliminadores de radicales libres.
Los polifenoles pueden proteger el cuerpo y el cerebro de la oxidación causada por los radicales libres y otras toxinas. La protección contra la oxidación es especialmente importante porque el cerebro utiliza mucho oxígeno, lo que lo hace vulnerable a la oxidación.
El aceite de oliva está repleto de vitaminas esenciales para el cerebro.
las vitaminas E y K son dos vitaminas importantes para la salud cerebral, y el aceite de oliva es rico en ellas.
La vitamina E, particularmente en presencia de vitamina C, ayuda a mantener una buena memoria, desacelera la pérdida de memoria y reduce en gran medida el riesgo de enfermedad de Alzheimer y demencia. Esta vitamina también puede reducir el daño causado por una apoplejía al redirigir el suministro de sangre después del evento. Estudio de la Universidad de Harvard sobre esto.
Por otro lado, la vitamina K ayuda a mantener la agudeza cerebral a medida que uno envejece y aumenta la velocidad de procesamiento cerebral. También puede aumentar su memoria, particularmente recordando palabras, lo cual es un problema común a medida que las personas envejecen. Esta vitamina también juega un papel en la prevención del Alzheimer.
El aceite de oliva combate la depresión.
Las investigaciones descubrieron que reemplazar los aceites vegetales poco saludables, como la canola, por aceite de oliva puede reducir el riesgo de depresión en casi un 50 por ciento.Enlace al estudio citado.
Con base en este hallazgo, los investigadores concluyen que el riesgo de depresión aumenta a medida que también aumenta la ingesta de grasas trans.
El aceite de oliva también aumenta los niveles de dos sustancias químicas esenciales del cerebro.
El factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF) y el factor de crecimiento nervioso (NGF).
El BDNF es una proteína que estimula la formación de nuevas células cerebrales y puede prevenir los efectos negativos del estrés en el cerebro. Ambos químicos promueven la formación y restauración de las células cerebrales. Uno de los cientos de estudios sobre los impresionantes efectos de esta proteína.
El aceite de oliva también protege contra la depresión, ya que los bajos niveles de BDNF están relacionados con la enfermedad.
El aceite de oliva ayuda a prevenir enfermedades neurodegenerativas.
El aceite de oliva puede proteger el cerebro del deterioro cognitivo. La investigación demostró que consumir más grasas monoinsaturadas mejora la memoria y otras funciones cognitivas en los adultos mayores.
Además, otras investigaciones revelaron que seguir una dieta mediterránea rica en aceite de oliva puede reducir el riesgo de enfermedad de Alzheimer hasta en un 40 por ciento. Se ha demostrado que el aceite de oliva, como parte de la dieta MIND, reduce el riesgo de la enfermedad de Alzheimer en un 53 por ciento. Enlace al estudio citado.
El oleocanthal, un polifenol antiinflamatorio que se encuentra en el aceite de oliva, también desempeña un papel en la prevención de la enfermedad de Alzheimer, ya que puede atravesar la barrera hematoencefálica para eliminar en el cerebro las proteínas beta-amiloides relacionadas con la enfermedad de Alzheimer.
Además de sus beneficios para el cerebro, el aceite de oliva también estimula el sistema inmunológico, aumenta la densidad ósea, protege el corazón de enfermedades y reduce el riesgo de diabetes.
Elegir el aceite de oliva adecuado.
Como se ha mencionado anteriormente, el aceite de oliva proporciona muchos beneficios para la salud. Sin embargo, el tipo de aceite de oliva es importante.
Al comprar aceite de oliva, asegúrese de elegir sólo aceite de oliva virgen extra. El aceite de oliva virgen extra se extrae por prensado mecánico y en frio, mientras que otros tipos utilizan disolventes químicos para extraer el zumo.
También seria importante que saber si es de primera extracción lo que aumenta más su calidad.
Esto significa que el aceite de oliva virgen extra es de mayor calidad y contiene más polifenoles. Además, compruebe las fechas de fabricación y caducidad del producto y evite los que tengan más de un año de antigüedad.
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Además, sólo comprar aceite de oliva virgen extra en un vaso de color oscuro y no de plástico para evitar la luz y mantener el bisfenol A (BPA) fuera del aceite.
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