Beneficios del Certificado Energético: Parte 1

El carácter obligatorio de poseer un Certificado Energético para alquilar o vender un local o vivienda, y el hecho de que esto conlleve un coste económico asociado no ha sido muy bien recibido por los propietarios de los inmuebles.

Sin embargo la realización del Certificado Energético conlleva una serie de beneficios, entre los que cabe destacar los siguientes:

1º Reducción del consumo energético

Durante la realización del Certificado Energético, en la fase de mediciones, se lleva a cabo un estudio de las características constructivas del inmueble, así como de las instalaciones de frío y calor.

La realización del Certificado Energético permite identificar los motivos que generan un consumo elevado de energía.

Supongamos que tenemos un aislamiento inadecuado, esto puede generar altas temperaturas en verano y bajas temperaturas en invierno, lo cual desemboca en un mayor consumo de energía en equipos de aire acondicionado o calor.

Una vez conocidos los problemas con los que cuenta nuestro inmueble y las causas de los mismos, podemos actuar sobre ellas para modificarlas, con la consiguiente reducción en el consumo de energía eléctrica.

NOTA: En la realización de un Certificado Energético, es imprescindible plantear una serie de posibles mejoras (al menos dos) a llevar a cabo en el inmueble, cuya finalidad sea aumentar la eficiencia energética del mismo, aumentando así su calificación.

2º Ahorro económico derivado

Si decidimos llevar a cabo cualquiera de las mejoras propuestas, como consecuencia inmediata de la reducción en la demanda de energía eléctrica, se produce una disminución en el coste económico de la factura de la luz.

3 º Buena amortización de las inversiones

Lógicamente si decidimos llevar a cabo cualquiera de las mejoras propuestas para reducir el consumo de energía, esto conllevará realizar obras o adquirir los equipos necesarios, con la consiguiente inversión económica.

Sin embargo en la mayoría de los casos el ahorro generado en la factura de la luz hace que los plazos de amortización de la inversión sean bajos.

Además es muy importante hacer notar que según pasa el tiempo y sube el precio de la energía, los ahorros generados son mayores, y que una vez se haya amortizado la inversión realizada, sólo se generarán ahorros.