Dentro de tres días saldremos hacia Benín. Más o menos a estar horas, cogeremos el avión de Air Maroc hacia Casablanca y de allí a Cotonú (Benín), donde en el año 2000 se firmó el famoso Acuerdo de Cotonú, entre la UE y los países más pobres de África, Caribe y el Pacífico (los que llaman ACP) para mejorar el comercio y, en teoría, reducir la pobreza.
Diez años después, estos acuerdos no parecen haber conseguido su objetivo y todavía son miles los niños vendidos en Benín para trabajar como pequeños esclavos domésticos o trabajadores para el campo. Al menos, sí podemos decir que Benín ha sido hasta ahora un ejemplo de democracia, aunque en las últimas elecciones, celebradas este año, hubo acusaciones de fraude y la situación no terminó de estar del todo clara.
Recorreremos Benín y la vecina Togo aunque aún no sabemos muy bien cómo. Autobuses, coches con conductor, taxis compartidos... Está por ver, pero esperamos poder acercarnos al norte del país para ver los castillos de los somba (tambermas, cuando pasamos a Togo) y visitar Gambié, esa ciudad construida sobre un lago en la que viven 20.000 personas y en la que se va en barca al colegio o al hospital.
Buscaremos también en la parte más oscura de la historia para conocer la ruta de los esclavos y, con ella, el trasvase de la práctica del vudú hacia Brasil y otros estados latinoamericanos.
Luego iremos a Ghana, el primer país en lograr la independencia, uno de los más estables y el 'elegido' por Obama para su primera visita africana. Allí veremos los vestigios de los primeros colonizadores portugueses, nos encontraremos con algunos periodistas que están haciendo cosas muy interesantes y, por supuesto, nos daremos algún que otro bañito en la playa, ¡que no todo va a ser trabajar!
Haré lo que pueda por actualizar, aunque sea con imágenes, este blog, pero si no fuera posible, a la vuelta daré cumplida cuenta de todo los visto, oído y aprendido.
¡Que pasen ustedes buen verano!