[6/10] En su primer trabajo sin Guillermo Arriaga como guionista, Alejandro González Iñárritu nos deja un intenso drama humano abocado a la tragedia, lleno de paradojas y con un resquicio de esperanza entre tanta oscuridad. No hay vidas cruzadas ni guiones fragmentados, pero el director mexicano continúa interesado en mirar de frente a la muerte y en recoger la reacción ante ella, en hacerlo con una estética hiperrealista que recree ambientes sórdidos y marginales, y en colocar a sus personajes en situaciones extremas que les exigen interpretaciones muy físicas y viscerales. En “Biutiful” nos acerca al barrio inmigrante de Barcelona y a Uxbal, un hombre que vive al borde del precipicio existencial, entre las drogas y las mafias de chinos y africanos ilegales, con dos niños pequeños a los que sacar adelante y el divorcio de una mujer arrojada al alcohol y al sexo, y con un cáncer terminal que le advierte “que arregle bien sus cosas antes de irse”.
La dureza de la vida queda plasmada desde los susurros en la oscuridad de la primera secuencia, mientras que la luminosidad de la enigmática escena del bosque nevado da la réplica esperanzada a un panorama desolador. Ese prólogo bipolar encontrará sentido en la escena final, cuando se cierre la estructura circular y se complete un retrato existencial en que lo siniestro y lo bello parecen ir juntos de viaje, en que la mezquindad y la miseria dejan entrever un fondo de humanidad en unos personajes que hacen lo que pueden –o saben– en su lucha por sobrevivir. Paradojas y contradicciones que llenan la vida de Uxbal, un buen hombre que quiere a sus hijos por encima de todo pero al que se acumulan las tragedias, que se mueve más allá de lo legal y de lo saludable… pero que conserva cierto sentido de justicia y humanidad. Sin duda, es un buen hombre al que le faltó un padre y que trata de redimirse en sus hijos, y también un buen esposo… al que le falla una mujer sin voluntad y con poco juicio.
Buena caracterización en el guión del personaje de Uxbal y mejor interpretación a cargo de Javier Bardem –premiado en Cannes–, con un trabajo que exige mucho en lo físico y también en lo emocional, y que sabe dejar ese rastro de humanidad en medio de tanta sordidez y desgracia. Más discutible es la construcción de un guión que se llena de temas y que entretiene en exceso con las lacras humanas y sociales, con algunas subtramas que podrían suprimirse por no aportar nada necesario (el accidente de los niños, la relación afectiva de los dos mafiosos, todo lo relativo al hermano de Uxbal y al club de alterne) o por parecer un poco impostadas en el tono general de la película (esa mujer consejera y supersticiosa): su supresión hubiera venido bien para acortar un largo metraje, sin perder por ello fuerza dramática la cinta. Pero esa carencia queda reparada por una magnífica ambientación fotográfica y musical, que genera entornos asfixiantes en los que apenas se puede respirar y que reflejan el interior de ese hombre que lucha contra los elementos y contra la desesperación.
Si la angustia de un hombre al borde de la muerte está bien conseguida, no es menos dramática la que traza sobre una sociedad que genera pobreza y desigualdad, con mafias que explotan y se aprovechan del inmigrante ilegal indefensos en su necesidad, con situaciones de corrupción e indignidad que a todos salpican y de las que todos son responsables. Muy dura es la escena de las estufas de gas, y muy humana la reacción de Uxbal ante ella o ante la mujer de Senegal, personaje más luminoso y positivo en tan sórdida historia. Una cinta de contrastes y de situaciones muy crudas y nada complacientes, en la que pesa más la oscuridad que la luz y el drama que la emoción, que trata de preguntarse por lo que hay detrás de la muerte y que suspende el juicio ante las paradojas de la vida. Mejor en lo visual que en lo narrativo, se hace un poco pesada por las atmósferas cargadas que la historia genera… aunque queda un pequeño foco de blancura entre tanta negrura.
Calificación: 6/10
En las imágenes: Fotogramas de “Biutiful” – Copyright © 2010 Universal Pictures, Focus Features, Menage Atroz, Mod Producciones e Ikiru Films. Fotos por José Haro. Distribuida en España por Universal Pictures International Spain. Todos los derechos reservados.