Revista Cocina
El bizcocho que os traigo es el resultado de que a una amiga le den una calabaza tamaño familiar y tenga que repartirla, y es que eso mola mucho, de repente te ves con casi dos kilos de calabaza, y tienes que buscar inspiración, así que se aproximan muchas recetas de calabaza en el blog, ¡¡avisados estáis!!
Además de la calabaza, tenía yo ganas de probar la harina de espelta, que llevaba en casa semanas y aún no había encontrado el momento de utilizarla en ningún bizcocho o pan. ¡¡Ya tenía excusa para hacer este delicioso bizcocho!!.
Como veis en el corte, la calabaza aporta una jugosidad impresionante, y la harina de espelta hace que el bizcocho sea más ligero, al menos a mi me lo parece, ¡¡me ha encantado y seguro que repetiré!!
Toca ponerse el delantal, y ¡¡a cocinar!!
Ingredientes- 500 gramos de calabaza.- 200 gramos de harina de espelta.- 200 gramos de azúcar integral de caña.- 3 huevos.- 50 ml de aceite de oliva virgen extra.- 1 sobre de levadura.- 1/4 cucharilla de nuez moscada.- 1/4 cucharilla de jengibre.- Un puñado de pasas.
Precalentar el horno a 220º y engrasar un poco la bandeja del horno. Pelar y cortar en cuadrados la calabaza y llevarla al horno hasta que se dore un poco, pasar por la batidora hasta que quede como una crema y reservar, hasta que enfríe.
Precalentar el horno a 180º, engrasar el molde que se vaya a utilizar.
En un bol, mezclar la harina de espelta con la levadura y las especias, y reservar.
En otro bol, poner los huevos, el azúcar y el aceite, y mezclar bien hasta que quede una mezcla integrada y esponjosa.
Añadir los huevos uno a uno, mezclando bien cada vez que se añada uno y no añadir otro hasta que no esté todo bien integrado.
Añadir a la mezcla el puré de calabaza y mezclar bien.
Añadir poco a poco la mezcla de harina, levadura y especias. Mezclar bien.
Cuando todo esté integrado, añadir las pasas, remover y verter la mezcla en el molde que se ha engrasado y llevar al horno. Hornear durante 50 minutos.
Dejar enfriar sobre una rejilla.
Espero que os haya gustado.