Revista Cultura y Ocio

Blogmas día 6. Mis ultimas 17 navidades.

Publicado el 06 diciembre 2015 por Missmary0592

navidad thunder BLOGMAS

Rodaba el año 1998, yo tenía 9 años y me enteraba de poco. Mis molestias eran basicamente que me dieran comida y me compraran juguetes. ¿Que iba a saber yo que ese año iba a cambiar el resto de mi vida hasta hoy?

Con 13 años comenzarón las navidades tetricas. En el año 2002 en Venezuela se convoca a un paro petrolero, un paro básicamente de un grupo de empresarios y personas como medida de presión para que Chavez dejase el poder. Cosa que no ocurrio.

Recuerdo perfectamente que ese año fue la primera vez que comence a notar esa apatia en la gente, esas pocas ganas de salir o de compartir. Simplemente pensaban en que este gobierno tenía que caer, pero al mismo tiempo había miedo, miedo de no saber como y cuantos iban a morir en esa espera.

Cada año, en diciembre, a modo de maldición, en Venezuela se hacen elecciones. Quizás no cada año, pero casi. Por lo tanto mis ultimas 17 navidades han visto calles llenas de publicidad de partidos políticos, concentraciones, marchas, disturbios, miedo. En las ultimas 17 navidades me he acostumbrado a escuchar “bueno tu sabes que la semana pasada le dieron dos tiros a mi hermano en la pierna para quitarle el celular” o cosas como “mandame un mensaje cuando llegues a tu casa para saber que todo esta bien” y ese todo esta bien significa que no te mataron, no te secuestraron, no te violaron, no te robaron y llegaste bien. 

Aun tengo recuerdos alegres de navidad. Cuando mi mamá hacia hallacas y ensalada, cuando mi papá me llevaba a comprar la ropa para 24 y 31, cuando mi papá me compraba esa muñeca o esa cosa que tanto había querido todo el año. También recuerdo los vecinos tocando l timbre para darte elfeliz año,el ruidor ensordecedor de la pirotecnia a la 12 de la noche el24 y el 31. La música a todo volumen. Las luces en las ventanas de cada apartamento. La gente en la PB del edificio echando cuento.

Pero en este momento casi nada de eso existe. Ya no puedes estrenar un 24 y el 31, solo puedes comprarte una muda de ropa y vas bien. No puedes comprarle a tu hijo el juguete que quiere sino el que te alcanza. No puedes hacer 100 hallacas para toda la familia y los vecinos porque no consigues harina para hacer la masa y la carne es muy costosa. No puedes tomarte una botella de ponche crema sin pensar que quizas estas malgastando el dinero en esa botella, porque con lo que cuesta la botella puedes comprar otra cosa. No puedes decir “me voy de viaje a tal país” porque eso es básicamente imposible.

En Venezuela salir a la calle, en cualquier epoca del año, es producto de nervios. En Diciembre empeora más. Las empresas acostumbran a dar en diciembre un aguinaldo a sus empleados, los malandros lo saben, por lo tanto en Diciembre están mucho más alerta. Te pueden robar en un centro comercial, en la puerta de tu casa, saliendo de la oficina, cruzando la calle, en la panaderia, haciendo la cola para el cajero… No hay un sitio donde se pueda estar segura.

Muchas veces veo a esos jovenes de 15 o 16 años que no les importa nada, que le preguntas que opinan sobre lo que pasa en el país y te dicen que “la cosa esta mal” pero que “va a cambiar” y entiendo su despreocupación. La entiendo porque nacieron en este caos. Para ellos que te llamen en el metro y sudar frio porque si el atiendes pueden robarte, es normal. O montarse en la camioneta para su casa pensando “no me van a robar, no me van a robar, no me van a robar, no me van a robar” es normal. 

Para mi no. Yo no nací en estas condiciones. Yo no crecí viendo carajitas de 12 años embarazadas. Yo no crecí escuchando “no salgas a esa hora porque uno no sabe que te puede pasar”. De hecho, crecí en un hogar donde mi papá era clase media baja, vivía en una zona popular, y con su esfuerzo, su trabajo y su sueldo logro comprarse un carro, logro viajar, logro vivir. Yo ahora mismo, con un sueldo como el que tenía mi papá cuando yo tenia 7 año dudo que pueda vivir. No creo que pueda ni siquiera comer un mes de manera decente.

Tengo recuerdos de cuando mi abuela me decia “mira mija baja a la panadería y comprame un cuartico de café” El cuartico de café era una bolsita pequeñita de café, que realmente depende de como lo hicieras podía darte para hacer cafe dos o tres veces. Igual que mi abuela compraba una barrita de mantequilla Nelly para rellenar la arepa cuando se había acabado la del pote.

Mi papá y yo íbamos hacer mercado cada mes. Era emocionante porque yo iba metiendo cosas en el carrito. No sé porque a los niños les emociona tanto eso, no recuerdo porque me emocionaba tanto a mí. Mi papá compraba tres cosas de cada producto. 3 paquetes de harina. 3 paquetes de arroz. 3 paquetes de pasta larga y 3 de pasta corta. 3 paquetes de azúcar. 1 lata de leche. 3 paquetes de café…

Eso ahora es imposible. Ir al supermercado es verdaderamente deprimente. Vivimos bajo una regulación permanente todo el tiempo. Solo puedes comprar el día que te toca, lo que llego y a ciertas horas, aparte de hacer la cola claro está. Y eso es deprimente desde cualquier punto que se vea. Es una humillación.

Cada Diciembre la gente asiste avotar, ultimamente es cada vez mas personas. Deseando y anhelando poder salir de esta situación. Pero este año es particular porque el año ha sido terrible. Cuando mi abuela me dijo “ay mija esta situación es peor que toda la dictadura de Perez Jimenez” le creí. Porque vivimos una especie de dictadura/comunismo/locura que es inaguantable. Salir a la calle es un sufrimiento. Ya no le ves el rostro a la gente, solo ves si traen bolsas con comida y de donde es la bolsa. 

Así que mi blogmas 6 es dedicado a estas votaciones que nos tienen que dar una luz en el camino para salir de esta pesadilla. Dudo que se puedan aguantar 2 años más iguales o peores al 2015.

               


Volver a la Portada de Logo Paperblog