Aunque también lo podéis utilizar como acompañamiento, pero para picotear me parece una idea genial y además no da remordimiento de conciencia.....
Desde que tengo a mi hija en tierras británicas, me pide que publique recetas ligeras y con ingredientes que pueda encontrar allí, así que me he puesto a ello....
Con deciros que el día que los hice, le mandé la foto, me pidió corriendo la receta, y esa misma noche los había preparado, eso si que es rapidez!!!!!!
Ella los preparó más planitos, pero igual de buenos, os dejo aquí la conversación y las fotos de ella....
Pues eso, que le han encantado, así que teniendo el visto bueno de ella, puedo estar tranquila de que os van a gustar. Así que os cuento....
Ingredientes:
500 gr de calabacín
1 cebolla pequeña, unos 100 gr
1 diente de ajo
150 gr de queso fresco o de untar
2 rebanadas de pan de molde
2 Huevos
1 cucharadita de orégano
50 gr de queso rallado al Gusto
sal y pimienta
1. - Lavamos bien el calabacín y lo rallamos fino.
2. - Lo ponemos en un colador, apretamos para que suelte el agua que contienen, le añadimos un poco de sal y lo dejamos escurriendo media hora, para que suelte todo el jugo.
3. - Encendemos el horno a 19oº-200º y vamos picando el ajo y la cebolla, lo más fino posible.
4. - Ponemos todos los ingredientes en un bol, con el pan desmenuzado, y removemos bien, que quede todo bien mezclado.
5. - Con un sacabolas o una cuchara, vamos poniendo porciones en una bandeja de horno engrasada o con papel de hornear.
6. - Las pincelamos con aceite y metemos al horno 20-25 minutos, hasta que empiecen a tomar color.
7. - Dejamos enfriar unos 5 minutos y servimos acompañados de salsa, yo les puse boloñesa, mi hija les puso salsa de yogur...eso eso es a gusto de cada uno.
Y listos!!!!
Aquí os dejo el vídeo resumen....
Aperitivo ligero y sano.