A los que nos encanta el queso nunca nos cansamos de el, da igual un queso fuerte, mas suave, de cabra, oveja, azul o de cualquier color, cualquier receta que lleve queso me llama la atención y siempre intento hacerla y ésta es una de ellas, la pena es que no me acuerdo donde la vi, solo se que la apunté en un papel, y debía llevar prisa porque casi no me entiendo ni yo misma la letra.Hablando de no entender la letra, me gusta tener en la mesilla una libreta y un boli, porque antes de dormirme me encanta pensar recetas, o como mezclar ingredientes, o decoración para las fotos, es cuando mas me inspiro no se por que, y lo apunto en la libreta, pero de vez en cuando la tengo que pasar a limpio porque no hay una hoja que esté decente, a veces estoy medio dormida y otras escribo tumbada por no despertar al que tengo al lado y claro salen unas letrujas... Voy a tener que pensar otra manera de apuntar las ideas.
INGREDIENTES:
Un rulo de queso de cabra
50 ml. de leche entera
pistachos
nueces peladas
semillas de sésamo
azúcar
En un bol aplastamos el queso de cabra y añadimos la leche poco a poco hasta que cojamos bien la textura cremosa, añadimos los pistachos y las nueces todo bien picadito y reservamos en la nevera una hora por lo menos, para que quede firme para manejarla después a la hora de hacer las bolitas.En una sartén caliente echamos el sésamo para que se tueste, suelta un olor riquísimo, añadimos el azúcar para que se haga caramelo, damos vueltas con una cuchara de palo y cuando esté lo echamos en una tabla o mármol, cuando enfríe un poco lo partimos y lo echamos en un mortero para molerlo y que quede como polvo, pero con algún trocito.Formamos las bolas y las rebozamos en el polvo de sésamo.