Bombones de chocolate, toda una tentación

¿Quién es capaz de decir que no a un bombón? Estas pequeñas delicias en miniatura sirven tanto para acompañar un café como para un pequeño tentempié. Por su puesto son también una opción de regalo muy válida para personas a las que queramos agradecer algo o desear una pronta recuperación.

En las tiendas los hay de muchos tipos y calidades, pero también los podéis hacer en casa con estos moldes que disponemos en nuestra tienda cocinista. Cada cual puede usar la receta que más le guste o a la que esté acostumbrado.

Nosotros os proponemos una muy sencilla. Primero tendréis que elegir con qué chocolate prepararlos. Negro, blanco, con leche… También podéis hacerlos de diferentes sabores. El chocolate lo tendréis que fundir, para ello lo más rápido es el microondas. Eso sí tened cuidado e id vigilándolo para que funda todo de manera homogénea. Luego es tan fácil como repartirlo con una cucharilla de café o con una manga pastelera sobre los moldes. Después con una espátula podéis dejarlos lisos, quitando el exceso de chocolate que puedan dejar.

Una vez hecho el proceso, hay que dejarlos enfriar y pasado un tiempo meterlos al frigorífico (os recomendamos que los tapéis con un papel de film para que no cojan olores de otros alimentos que tengáis dentro). Cuando estén sólidos se desmoldarán y…¡listos para comer! Evidentemente, existen recetas más complejas y podéis preparlos cómo os apetezcan más.

¿Qué moldes usar?

Los hay de muchos estilos. Los más clásicos pueden ser los moldes semiesféricos o los que tienen forma circular rizada. Más originales pueden resultar los bombones en forma de pirámide,  con forma geo  o con forma de bloque.

Para los más románticos no faltan los moldes que nos permiten hacer corazones de chocolate, que los convertirán en un detalle muy agradable para parejas. Sin embargo, si queréis formatos más divertidos, quizá os guste más este molde marino para servir bombones que representen peces, estrellas y conchas o este con formas de hojas , muy propicio para el otoño.

Y si queréis sorprender a los más pequeños, no dejéis de echarle un ojo a este molde de huevos de chocolate. Está pensado para hacer huevos de pascua, pero se pueden elaborar durante todo el año.