Además, le añadí un par de perfumes que siempre me recuerdan a Medio Oriente (canela y agua de azahar) y la receta perfecta para darnos un gustito, o un pecadillo para consentirnos en esos días en los que necesitamos un mimo, estaba lista.
Ingredientes nobles, técnicas sencillas y productos sanos son la base de esta deliciosa receta que podemos preparar, incluso, con nuestros niños. Aquí les dejo el listado de ingredientes para que no se pierdan de preparar estos bombones.
En procesadora o mixer, procesá 100 gramos avena en copos junto con 80 gramos de almendras (con piel), 1/2 cucharadita de canela molida y una pizca de sal hasta formar un arenado muy fino. Reservá.
Por otro lado, procesá 18 dátiles secos (sin hueso) hasta que formen una bola - o masa - más o menos homogénea y algo compacta.
Entonces, añadí a la mezcla el arenado de avena y almendras que habías reservado e incorporá 1 a 2 cucharadas de agua potable y algunas gotas de agua de azahar. Procesá hasta integrar muy bien, formando una masa homogénea.
Con las manos húmedas, tomá pequeñas porciones de masa y formá bolitas de tamaño parejo. Ubicalas en pirotines/cápsulas de papel/capacillos y dejalas en la heladera/nevera hasta el momento de consumirlas.
¡Eso es todo! No hay más que disfrutar de estos exquisitos bombones con perfumes y sabores de Medio Oriente, sanos, simples de preparar y divertidos de hacer (por eso de que podemos pedirles a los más chicos de la casa que nos ayuden en la tarea).
Observaciones y recomendaciones finales: El agua de azahar de la receta pueden reemplazarla por agua de rosas.
Por estar elaborados a base de dátiles, estos bombones no necesitan que se les agregue azúcares o edulcorantes de ningún tipo.
Les recuerdo que la avena se encuentra entre los cereales más completos y saludables que podemos consumir porque aporta vitaminas E (antioxidante), B6 y B5 (involucradas en el correcto desarrollo y funcionamiento de nuestro sistema nervioso), yodo y calcio; además de minerales como selenio, hierro, magnesio y cobre. Por contener aminoácidos esenciales ayuda al hígado a depurar los compuestos pesados de nuestro organismo, mientras que su fibra soluble evita el estreñimiento y favorece el adecuado funcionamiento de nuestro intestino. Además, es una excelente fuente de grasas insaturadas (Omega-6) que ayudan a disminuir el colesterol malo.
Los dátiles son muy nutritivos, puesto que están formados de un 70% de azúcares (son ideales para reponernos después de realizar actividades físicas). Además, poseen hierro, fósforo, calcio, magnesio, cobre y potasio. Contienen también vitamina A, Omega-3 y Omega-6, vitaminas del grupo B, betacarotenos y antioxidantes. Son ideales para ayudar a mejorar la agilidad mental, combatir el estrés y calmar los nervios. Asimismo, combaten la anemia y el estreñimiento, pero no están indicados en dietas hipocalóricas o en personas diabéticas.
Las almendras, entretanto, son ricas en vitamina E (que contribuye en el mejoramiento de la piel, uñas y cabello), hierro, fósforo, potasio, magnesio, azufre, cobre, zinc y calcio. Además, contienen vitaminas B1, A, C y D, y los 8 aminoácidos esenciales para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Reducen el colesterol malo, contribuyen a mantener sano y ágil a nuestro cerebro, disminuyen las posibilidades de padecer enfermedades cardiovasculares y ayudan en dietas hipocalóricas por su gran capacidad de saciedad. Asimismo, son una de las pocas fuentes de proteínas vegetales que contienen arginina, un aminoácido esencial para el correcto crecimiento de los niños.
Espero que prueben estos bombones porque son un excelente recurso para reponer energías, darnos un respiro en medio de la vorágine cotidiana, un dulce muy sano para los más pequeños o un plus si necesitamos algo extra de energías en época de exámenes finales en la facultad o el colegio.
Les deseo una excelente semana. Espero que sean muy felices, experimenten en la cocina y disfruten con sus seres queridos. ¡Hasta la próxima!