Revista Cocina
La receta que os traigo hoy es una de mis tapas favoritas. Como muchos de vosotros sabréis, tengo anisakis, ese bichejo que anda en los pescados y no puedo tomar ningún tipo de pescado que no haya sido previamente congelado a una temperatura adecuada y durante un tiempo determinado. Pues bien, os cuento esto porque el anisakis me vino precisamente por comer un bocadillo de boquerones en vinagre. Creo que no lo he pasado peor en mi vida.
Además, el tema del anisakis no estaba entonces tan estudiado como está ahora, de hecho no daban con lo que me pasaba, y menos mal que dieron con ello porque la alergóloga me dijo que si hubiera tomado una aceituna rellena de anchoa, podía haberme dado un choque anafiláctico. El resultado fue cinco años sin poder comer pescado, ni siquiera congelado.
Ahora ya puedo comer casi todo tipo de pescado (no como salmón ahumado, ni anchoas en salazón), eso sí, tengo que tener una serie de precauciones que a lo mejor vosotros no tenéis que tener, aunque yo os recomiendo que las tengáis. Yo congelo el pescado a -20º durante un mínimo de 72 horas antes de comerlo, procuro no comer pescado crudo fuera de casa ya que no me termino de fiar. Además tengo que tener cuidado cuando me baño en el mar.
Por eso me ha parecido bien contaros cómo hago yo los boquerones en vinagre, que imagino que serán muy parecidos a los que hacéis vosotros en casa.
Ingredientes:- 500 gr de boquerones, yo los suelo comprar grandes.- Vinagre (no vale el vinagre de Módena, yo utilizo un vinagre de vino blanco normal).- Sal.- Aceite de oliva virgen extra.- Ajo- Perejil.
Lo primero que yo hago cuando llego de la pescaderia es limpiar los boquerones, en algunas pescaderias os los limpian, a mi no me importa limpiarlos, hay que quitarles las cabezas y las espinas. Se aclaran con agua con agua y se meten en un recipiente que sea apto para congelar. Llevarlos al congelador y tenerlos un mínimo de 72 horas a -20º.
Transcurrido ese tiempo, se descongelan, y una vez estén descongelados, en un bol o un plato hondo, ponemos bastante vinagre, hay que poner bastante porque los boquerones han de quedar cubiertos. Echar sal, y colocar los boquerones en el vinagre. Una vez estén todos colocados hay que tenerlos así, cubiertos con el vinagre de 4 a 6 horas.
Una vez haya pasado el tiempo, escurrir los boquerones y ponerlos en una fuente cubrir con aceite de oliva virgen extra y echarles por encima el ajo picado y el perejil también picado.
Los podéis comer tal cual o acompañados con unas patatas fritas. Están estupendos.
Espero que os haya gustado.